¿Quiénes conforman el círculo de hierro del presidenciable del Partido Republicano?

Dos personas acompañan al abanderado del Partido Republicano, José Antonio Kast, a cada una de las actividades a las que asiste: su jefa de comunicaciones, Carolina Araya; y su asesor más cercano, Cristián Valenzuela.

Ambos forman parte del “círculo de hierro” del abanderado que se impuso en la primera vuelta de este domingo. Los dos estuvieron vinculados a su primera aventura presidencial de 2017.

Araya (30) partió a cargo de las comunicaciones de su esposa, Pía Adriasola. Una vez que terminó esa campaña, Kast le pidió que fuera su jefa de prensa y, en enero de este año, asumió como encargada de comunicaciones del abanderado y del Partido Republicano.

Ella es periodista de la Universidad del Desarrollo, y es quien maneja la agenda de Kast, aconseja sobre las entrevistas y decisiones estratégicas de la campaña.

Kast, de hecho, según su entorno, siempre bromea con que su equipo es pequeño, pero eficiente.

En el caso de Valenzuela (40), quien es abogado de la Universidad Católica, durante el 2007 comenzó a trabajar como asesor legislativo en la Fundación Jaime Guzmán. En esa instancia, él y Kast comenzaron a forjar un vínculo de confianza debido a que lideraron varias ofensivas en conjunto, por ejemplo, la acusación constitucional en contra de la ahora exabanderada DC Yasna Provoste.

Posteriormente, Valenzuela hizo un postgrado en Estados Unidos y volvió en 2017 para la campaña presidencial de Kast. Por esos días, Valenzuela no estaba muy convencido de que el exUDI iba a ser capaz de reunir las firmas necesarias para su candidatura y, por lo mismo, terminó sorprendido. Desde ahí en adelante ambos trabajaron en el diseño en redes sociales que hasta hoy mantiene el candidato y comenzaron a pavimentar el camino para la segunda apuesta presidencial.

El abogado, además, fue una pieza clave en la construcción del programa de gobierno, que hoy es materia de cuestionamiento y que deberá ser modificado. De hecho, a él se le responsabiliza de la estrategia de “acentuar” ciertas cosas programáticas con el objetivo de que Kast fuera obteniendo mayor visibilidad pública, lo que, dicen, fue dando resultado y hoy lo tienen compitiendo en la segunda vuelta presidencial.

Valenzuela, de hecho, fue contrario a la idea de cambiar el programa antes de la primera vuelta porque defendió la tesis de que había que mantener la coherencia y hacer ajustes pensando en “un plan de gobierno” de cara al balotaje.

Asimismo, el abogado, quien también en el pasado militó por unos años en la UDI al igual que Kast, ha sido clave en varias decisiones, por ejemplo, cuando en 2017 perdió los comicios y obtuvo casi un 8% de la votación le recomendó ir a saludar inmediatamente al entonces candidato Sebastián Piñera. También le aconsejó pactar con Chile Vamos para la elección de convencionales.

Eso sí, también ha dado ideas que no se terminaron adoptando, por ejemplo, que Kast participara en las primarias oficialistas y no que fuera directo a la primera vuelta. Su cálculo era que así la candidatura de Kast tendría una mayor potencia.

El exdiputado Arturo Squella es otro de los que integran el círculo de confianza del abanderado. El exparlamentario UDI, quien ya había colaborado con Kast en su primera apuesta por llegar a La moneda, comenzó a trabajar de manera soterrada en esta campaña, en temas como la coordinación con los partidos oficialistas del bloque Chile Podemos Más. Y también ha sido nexo con personeros de La Moneda, por ejemplo, Jaime Bellolio (Segegob), de quien es amigo desde hace años.

Ayer ,en la jornada de victoria de Kast, el exdiputado UDI se dejó ver al aparecer en un video difundido por el equipo del abanderado una vez que llegó al comando cuando se conocieron los resultados de los comicios.

Squella fue parlamentario gremialista durante dos periodos, por lo que conoce a otros legisladores de las distintas sensibilidades dentro de la centroderecha. Fuentes de Republicanos sostienen que esa red ha sido clave para tender puentes en el sector y será incidente en la búsqueda de acuerdos programáticos.

En esa misma línea, en el comando de Kast dicen que Squella profundizará su rol en la campaña en los próximos días y que probablemente asumirá de manera oficial como coordinador político. Algo que, en todo caso, se deberá resolver en las próximas horas o días.

Es su jefe de campaña. Julio Feres si bien en 2017 no tuvo un rol en la primera línea, lo cierto es que su relación con Kast data de décadas. Ambos son amigos y se conocieron siendo estudiantes de la Pontifica Universidad Católica, Kast estaba en derecho y Feres en ingeniería comercial en el año 1985.

Los dos participaron en el movimiento gremialista del fallecido senador Jaime Guzmán, después compartieron filas en la UDI hasta el 2016 cuando ambos renunciaron. Feres, quien estuvo alejado de la política, solamente volvió a la esfera pública al ser llamado por Kast para ayudarlo en los comicios de la primera vuelta.

De ahí que se le ha visto coordinando en temas claves como el debate presidencial -donde lo acompañó hasta la sede de TVN- o en las reuniones a puertas cerradas que hubo ayer en el comando tras la victoria con Kast y su círculo de hierro.

Otras dos personas que se han ido uniendo al anillo de confianza de Kast son el secretario general del Partido Republicano, Antonio Barchiesi, y la exministra de la Mujer y actual vocera de campaña, Macarena Santelices.

El primero es abogado de la Universidad Católica y uno de los fundadores del Partido Republicano. Barchiesi (30) conoció a Kast en el año 2009 cuando iba en su segundo año universitario. En el 2017 fue contactado por Squella para colaborar en la primera campaña de Kast y, posteriormente, el propio abanderado le pidió seguir trabajando con él y ahí derivó todo en la conformación del partido.

A Santelices, Kast la nombró como vocera el pasado 14 de agosto. De ahí en adelante, de a poco, se ha ido incorporando a las decisiones políticas. Ayer, de hecho, tuvo un rol protagónico en el cierre de campaña y entregó palabras previas, en el escenario que se instaló en el comando ubicado en Las Condes, al discurso de Kast.