¿Quinta dosis? Comité Asesor en Vacunas la descarta para la población general y la recomienda sólo para grupos de riesgo

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A partir de un requerimiento de la cartera sanitaria, el organismo debatió a fines de abril si era necesaria una dosis más. Concluyeron que no era recomendable para toda la población, pero sí sugirieron un nueva inoculación a las personas más expuestas y con más probabilidades de generar un cuadro grave de coronavirus.


¿Es necesaria una nueva dosis de refuerzo contra el Covid-19?

Ese fue el requerimiento que realizó, durante la última semana de marzo, el Departamento de Inmunizaciones del Minsal, al Programa Nacional de Inmunizaciones y al Comité Asesor en Vacunas e Inmunizaciones (Cavei) .

El pasado 11 de agosto -seis meses después del inicio de la vacunación masiva contra el coronavirus-, comenzó la aplicación del primer refuerzo o tercera dosis. Desde entonces, 14.111.813 personas la han recibido y con efectos contundentes pues, según distintos expertos y las mismas cifras de la cartera sanitaria, marcó una notable diferencia en la prevención de contagios, hospitalizaciones y muerte durante la última ola.

Asimismo, la pérdida de inmunidad ya es un hecho: tras seis meses, el efecto de la vacuna se desvanece. Por esta razón, el pasado 7 de febrero se inició a la campaña de vacunación masiva con una cuarta dosis que sigue en curso.

En este contexto, durante su primera reunión tras el cambio de gobierno, las nuevas autoridades de salud -cuya titular es Begoña Yarza- le encargaron al Cavei -que asesora a la cartera en la formulación de programas, estrategias y políticas de inmunización- la tarea de evaluar un refuerzo más.

Así, después de mirar la evidencia científica y reunir los antecedentes necesarios, el grupo zanjó la discusión el pasado 27 de abril, en su reunión mensual.

La recomendación

María Luz Endeiza, presidenta subrogante del organismo e infectóloga pediátrica de la Clínica Universidad de los Andes, explica que descartaron la necesidad de una nueva dosis para la población general: Cómo vamos a poner una quinta dosis si la gente aún no se termina de poner la cuarta. Necesitamos que toda la gente este con su vacunación al día y después de eso ver si es necesario la quinta y en qué momento”.

Desde que se inició el proceso -el pasado 10 de enero- 4.163.339 personas se han administrado la cuarta dosis. De acuerdo a los datos, la adherencia de las personas a la campaña de vacunación ha decaído. En el primer mes de la aplicación del segundo booster se ha visto una ralentización en el avance de la campaña. De acuerdo al análisis realizado por el Instituto de Políticas Públicas en Salud (IPPSUS) de la Universidad San Sebastián, el ritmo de vacunación contra el Covid-19 disminuyó 56% en comparación a la tercera dosis o primer refuerzo.

Sin embargo, Jaime Rodríguez, jefe de Infectología infantil de la Clínica Alemana, quien asumió a fines de noviembre la presidencia del Cavei, afirma que sí recomendaron otra dosis, pero solo para algunos sectores de la población: “Recomendamos una tercera dosis de refuerzo pasados los seis meses de la segunda, para las personas de la tercera edad, pacientes de alto riesgo, y personal de salud. Son personas que son más susceptibles de hacer infecciones graves por el virus, y además la inmunidad en los adultos mayores es menor en comparación con las personas más jóvenes”.

En el ente técnico recalcan que es necesario incentivar a la población a administrarse la cuarta dosis, sin embargo, la lentitud en este nuevo proceso no fue la única razón para no recomendar una nueva inoculación a la población general.

“La gente joven con la inmunidad que tiene con las dos dosis de refuerzo va a estar protegida, entonces salvo que cambie la epidemiología del virus, no se necesitaría una nueva dosis en la población más joven”, sostiene Rodríguez.

Los efectos de las vacunas

En ese sentido, la inmunización triple marca una diferencia en el desarrollo de la infección. Además, los expertos admiten que la inoculación masiva contra el Covid-19 ayudó a enfrentar la ola ómicron de mejor manera, pues los establecimientos de salud no sufrieron una demanda crítica durante los meses con más contagios.

Según las cifras de Salud, la tasa de ingreso a una unidad crítica es de 0,3 cada 100 mil habitantes sin protección contra el virus. Y en quienes tienen su esquema basal completo, esta cifra desciende a 0,2, mientras en la población con el refuerzo, las personas que requieren una cama crítica son 0,1 por cada 100 mil habitantes.

En la tasa de mortalidad la inoculación también tiene resultados positivos. De acuerdo a los registros oficiales, la incidencia en el grupo con la vacuna de refuerzo es 0,2, mientras que con dos dosis sube 0,4 y en el caso de los no vacunados aumenta a 0,6.

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