¿Sicariato, recompensa o venganza?: las hipótesis del secuestro a empresario en Rancagua y su búsqueda contrarreloj
Los sospechosos tenían los teléfonos de todos los empleados de la firma asaltada y se encontró la foto de la víctima y su esposa en el auto en que huían los delincuentes. El paradero del secuestrado aún es desconocido.
Encapsulados y con un amplio despliegue policial serán trasladados desde Rancagua los únicos tres detenidos por el secuestro al empresario metalúrgico de la Región de O’Higgins Rudy Basualto (50). Los imputados -dos de nacionalidad venezolana y un colombiano- serán formalizados el viernes y se mantendrán custodiados en la Cárcel de Alta Seguridad de Santiago, pues afirmaron temer por su vida si estaban en otro penal.
Es que el caso, al parecer, ha ido escalando en preocupación para los investigadores y carabineros del OS-9 que trabajan en la indagatoria que tuvo su origen la tarde del miércoles 8 de noviembre. Si bien hasta ahora no se tiene certeza, ni del paradero de la víctima, ni las motivaciones del secuestro, sí hay algunas líneas investigativas que se están trabajando, a partir de los últimos antecedentes recabados.
El secuestro ocurrió a las 13.00 de la tarde del martes, cuando cinco personas encapuchadas ingresaron de manera violenta a la empresa Haiser -con giro en el rubro de estructuras metálicas y maquinarias-, ubicada en una parcela en el sector de La Gonzalina. Armados, los asaltantes, según ha podido reconstruir la policía, intimidaron a los 15 trabajadores y los arrojaron al suelo, para luego retener al dueño del local y subirlo a un auto negro.
Enseguida el ataque fue reportado a la policía, quienes establecieron distintos puntos de control en la carretera, hasta que una hora y media después, a las 14.30 de la tarde, Carabineros logró interceptar el segundo vehículo involucrado en la huida de los delincuentes. Dentro del vehículo estaban: Néstor Mujica López (26), colombiano; Brian Sánchez Muñoz (23), venezolano, y José Vásquez (25), también venezolano.
En el procedimiento se logró la recuperación de un arma de fuego marca Glock, calibre .40 con munición en su interior, pero con el correr de las horas se pudieron comprobar otros antecedentes, los cuales apuntan a las tres principales hipótesis que tienen los investigadores sobre el origen del secuestro.
Los sospechosos: de Santiago y con ingreso irregular al país
Esas líneas investigativas son tres: según se ha podido recabar en la indagatoria de la Fiscalía Regional de O’Higgins y el OS-9 de Carabineros, los detenidos tendrían vínculos con bandas dedicadas al sicariato, por lo tanto, existe la sospecha de que la motivación principal del delito haya sido concretar un homicidio y no un secuestro. Todo esto es manejado como una hipótesis dentro del caso.
Los tres detenidos tienen domicilio registrado en Santiago y no en Rancagua, lo que también abre la duda entre fiscales y policías de por qué viajaron hasta esa ciudad para concretar el delito. Mujica, Sánchez y Vásquez ingresaron irregularmente al país, y el Ministerio Público ya pidió oficiar al Registro Civil para acceder a su registro en el sistema, dado que solo uno de estos tiene Rut.
La otra línea investigativa -y hasta ahora más oficial- tiene que ver con el secuestro. Es decir, que se haya amenazado a la víctima para hacerlo subir al auto y luego cobrar por su recompensa, algo que, por el momento, aún no se concreta. No se saben ni monto ni condiciones para liberar al empresario.
Pistas en este sentido hay. Por ejemplo, en el auto en el que fueron detenidos los tres primeros imputados se encontraron -además de los 15 celulares de los trabajadores de la empresa- el teléfono de la víctima, sus documentos, pero también registros de la identidad de su cónyuge. Es decir, no solo tenían el foco puesto en él, sino que también en su esposa.
La otra hebra investigativa está puesta en eventuales amenazas previas al empresario, algo que se está revisando directamente desde su celular. Para eso se están revisando sus contactos, sus mensajes y también si la víctima registraba antecedentes policiales previos. De esto último nada hasta ahora, salvo una denuncia por giro doloso de cheques.
Tanto la Fiscalía como Carabineros trabajan a contrarreloj para dar con el paradero de la víctima, dado que las primeras horas en este tipo de casos son fundamentales. Por lo mismo, se están periciando las muestras de sangre halladas, para de a poco avanzar en un tipo de delito que siempre es complejo abordar.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.