Viña del Mar, Huechuraba y Temuco: los alcaldes que tendrán mayoría opositora en sus nuevos concejos municipales

El nuevo escenario de los concejos municipales ya comienza a notarse tras las recientes elecciones, marcadas por una reconfiguración política a nivel local.

El gran protagonista ha sido el Partido Republicano, que pasó de tener una presencia marginal con 12 concejales en 2021 a alcanzar 234 en 2024, un salto del 1.850%. Este ascenso no solo refleja el crecimiento electoral del partido, sino también su consolidación como una fuerza emergente que ahora tiene un asiento privilegiado en las decisiones locales.

Por otro lado, el pacto oficialista Chile Mucho Mejor ha vivido la otra cara de la moneda. Pasó de contar con 836 concejales en 2021 a reducirse a 536 en estos comicios, perdiendo 300 representantes. Este descenso deja al bloque en una situación compleja para mantener su influencia en diversas comunas del país, donde la mayoría en el concejo será crucial para la gobernabilidad.

En algunos sectores la nueva composición complica la relación entre los alcaldes y los concejales, mientras que en otros abre nuevas dinámicas en la toma de decisiones en las comunas clave.

Por ejemplo, en la capital, el alcalde Mario Desbordes se verá fortalecido por una mayoría afín en el Concejo Municipal de Santiago, aunque enfrentará el desafío de integrar la postura de dos concejales republicanos recién electos. Por el contrario, en Viña del Mar, la reelecta alcaldesa Macarena Ripamonti (FA) tendrá que lidiar con un concejo donde no posee mayoría por primera vez, complicando su capacidad para implementar su programa en un segundo periodo en una de las comunas costeras.

Este reordenamiento en los concejos ha dejado huellas visibles. El bloque Por Chile Seguimos, por ejemplo, vio reducirse su representación de 337 concejales en 2021 a 250 en 2024, perdiendo 87 escaños. Dentro de este pacto destacan fuerzas como el Frente Amplio con 76 concejales, Acción Humanista con dos y el Partido Comunista con 104, además de 68 independientes.

En cuanto al pacto Chile Vamos, este logró consolidarse como una de las fuerzas más estables en los concejos municipales, registrando un crecimiento tanto en el sub-bloque UDI-EVO, que pasó de 358 concejales en 2021 a 392 en 2024, como en Renovación Nacional (RN), que incrementó su representación de 376 a 446 concejales.

Pero existen concejos municipales que serán un terreno de batalla en lo que será la definición de la gestión municipal en los municipios.

En ese sentido, la reelegida Macarena Ripamonti (FA) en Viña del Mar deberá lidiar por primera vez con una instancia con mayoría opositora. El órgano colegiado estará compuesto por dos frenteamplistas reelectos, Alejandro Aguilera y Nancy Díaz, además de un comunista y un socialista: Nicolás López y Sandro Puebla. Después, todo comienza a complicarse porque el resto de los concejales son tres de Chile Vamos, el independiente reelecto y cercano a la UDI Carlos Williams y tres republicanos.

En el caso del electo en Huechuraba, Maximiliano Luksic, el empresario independiente apoyado por Chile Vamos deberá lidear con un Concejo Municipal con minoría. De los ocho concejales de Huechuraba, cinco de ellos son de oposición a su administración y otros cuatro a su favor.

En Las Condes, donde salió electa Catalina San Martín (ind. ex-Evópoli) el Concejo Municipal se encuentra dividido principalmente en dos grandes acciones políticas: Un UDI, Guillermo Ureta; un independiente en el subpacto de UDI, Manuel Melero; Francesca Gorrini en el subpacto de Evópoli-independientes, sumado a Luis Hadad (RN) y Richard Kouyoumdjian (ind. por lista RN). Mientras que por el otro lado suman fuerza los concejales republicanos Catalina Ugarte, Pamela Hodar, Cristóbal de la Maza, junto a Leonardo Prat (republicano ind.) En cuanto a la fuerza opositora, resultó electa Gema Mahmoud (FA). Una de las mayores complejidades que deberá asumir San Martín son las diferencias con sus mismos pares republicanos debido a su condición como exmilitante de Evópoli y hoy apoyada por toda la centroderecha.

En Chillán, donde fue electo Camilo Benavente (PPD), el concejo es mayoritariamente opositor, con un UDI, un RN, dos republicanos, un socialcristiano y un independiente del pacto UDI-Evópoli. Son seis contra los cuatro del oficialismo. Misma suerte corre Roberto Neira en Temuco (independiente del pacto Contigo Chile Mejor), que ve que en un nuevo periodo a cargo del municipio seis de los nueve concejales serán opositores: un socialcristiano, dos RN, un republicano y dos independientes, uno por Amarillos y otra por RN. Al frente, un FA, un PS y un independiente por el PPD serán la contención.

Históricamente, los concejos municipales de Santiago han tendido a contar con una mayoría alineada al alcalde electo, como ocurrió durante la administración de la exalcaldesa Irací Hassler (PC), en la que el cuerpo colegiado estaba dominado por representantes de izquierda, especialmente del Partido Comunista. En esta nueva etapa, Mario Desbordes parece tener una ventaja similar. Según fuentes cercanas a los concejales de su sector, se espera que estos actúen como un soporte clave para el exministro de Defensa, especialmente en su proceso de adaptación a la gestión municipal, sin dejar de lado su rol fiscalizador.

En el caso de la comuna de Independencia, el escenario fue más contundente para la oposición. La candidata oficialista, apadrinada por el exalcalde Gonzalo Durán, no logró ganar el impulso necesario, ni sus compañeros de pacto consiguieron el apoyo requerido. Por el contrario, el nuevo alcalde Agustín Iglesias (ind-UDI) ha llegado con una mayoría política favorable en el concejo, lo que le permitirá enfrentar el mandato con un terreno más acomodado para su gestión.

El triunfo de Sebastián Sichel, independiente respaldado por Chile Vamos, marca una dura derrota para el Frente Amplio en uno de sus principales bastiones, Ñuñoa, liderado por la alcaldesa Emilia Ríos. Este es el primer cargo de elección popular que obtiene el excandidato presidencial y exministro; sin embargo, su gestión podría enfrentar obstáculos, ya que el Concejo Municipal ha quedado dividido entre fuerzas oficialistas y de oposición. Según los datos del Servel, cinco de los concejales pertenecen al oficialismo (FA, PC y PS), mientras que la oposición está compuesta por miembros de la UDI, RN y republicanos. En caso de empate, Sichel tendrá el voto dirimente, aunque los concejales del Frente Amplio se muestran optimistas, esperando una oposición abierta al diálogo.

Misma situación será en el caso de Camila Nieto en Valparaíso, que ocupará el sillón edilicio por primera vez en un escenario que le permitirá ser el voto dirimente. Esto porque el Concejo Municipal de la Ciudad Puerto está conformado por cinco oficialistas y cinco de oposición.

A simple vista, uno de los concejos municipales más a su favor será asumido por la sorpresa de las elecciones municipales: Matías Toledo (ind.) en Puente Alto. El edil deberá asumir el liderazgos de un Concejo Municipal con una mayoría absoluta de concejales oficialistas.

Y en Providencia, donde fue electo Jaime Bellolio (UDI), el concejo es mayoritariamente a favor, con un UDI, un ind. por pacto UDI, un Evópoli, dos RN y dos republicanos, en contraste con un PPD y dos del Frente Amplio.

Por el lado de los alcaldes que vieron conformarse un concejo favorable está Rodrigo Wainraight (RN) en Puerto Montt, que será acompañado por un UDI, un independiente por la UDI, dos RN y dos republicanos, mientras que del lado opositor habrá un representante del FA, PL, PS y PDD.

Hay, además, tres municipios con concejos divididos, donde el alcalde tendrá el voto dirimente ante tal situación. Tales son los casos de Carla Amtmann (FA) en Valdivia, Carlos Gatica (DC) en Coyhaique y Claudio Radonich (RN) en Punta Arenas.

Y si de nombres llamativos se trata, la suerte en las elecciones fue dispar.

En Providencia, por ejemplo, se presentó Josefa Errázuriz, exalcaldesa de la comuna entre 2012 y 2016, con una polémica gestión. Esta vez fue como independiente dentro del subpacto del PPD, aunque no logró su cometido: sus 2.317 votos y 2,3% de las preferencias no fueron suficientes. Quien sí salió electa en esa comuna fue Isabel Labbé, hija del coronel (r) Cristián Labbé, exalcalde de la comuna entre 1996 y 2012 y sentenciado en febrero de 2023 por aplicación de tormentos durante la dictadura.

En la esfera del deporte, en tanto, Juan Gonzalo Lorca, exjugador de Colo Colo, fue como independiente por Chile Vamos en La Florida. Logró 2.858 sufragios y 1,39% de los votos sin salir electo. También aspiró a ser concejal, pero de Santiago, el histórico exjugador de Colo Colo Leonel Herrera, como independiente por la UDI. Sin embargo, sus 3.349 votos y 1,82% no le alcanzaron. Bessy Gallardo (PC), exconvencional, no pudo ser electa en la misma comuna. En el camino también quedó la modelo Denisse Campos (independiente por RN), quien aspiraba al concejo de Valparaíso, pero solo logró 746 votos (0,48%).

Mejor le fue al director de orquesta Horacio Saavedra (UDI), quien salió electo concejal en Maipú, y al exfutbolista Frank Lobos (independiente por RN) elegido en Cerro Navia. En Ñuñoa, tanto la periodista Alejandra Valle (PC) como Daniela Bonvallet (RN), hija del exjugador, lograron ser reelectas. En Pirque, en tanto, el actor Claudio Arredondo (independiente por el PPD), padre de la ministra Carolina Arredondo (Culturas), también consiguió ser concejal.

Uno de los casos más evidentes es la familia Melo. El exalcalde Sadi Melo (PS), padre del actual diputado Daniel Melo -también socialista-, compite como candidato a consejero regional. Su otro hijo, Simón Melo (PS), en tanto, va a la reelección como concejal por El Bosque, la comuna que su papá administró por 30 años.

¿Más casos? Carlos Cruz-Coke (RN), hermano del senador Luciano Cruz-Coke (Evópoli), fue electo en Vitacura; Rodolfo del Real (RN), hermano de la diputada Catalina del Real (Partido Republicano), consiguió la reelección en La Reina, y Manuel Melero (UDI), hermano del exministro Patricio Melero, consiguió ganar uno de los cupos para concejal de Las Condes.