El próximo viernes 6 de diciembre Catalina San Martín pondrá el punto final a su historia como candidata a la alcaldía de Las Condes y abrirá un nuevo capítulo al mando de la comuna, poniendo fin al período de Daniela Peñaloza (UDI). En una elección inesperada, la independiente que se define de centroderecha derrotó a la exministra Marcela Cubillos, quien fue respaldada por los partidos de Chile Vamos.
La nueva autoridad anuncia que una de sus primeras medidas será profundizar en las auditorías al municipio. Como concejala fue crítica de la gestión de Peñaloza, aunque afirma que su ánimo no es “estar buscando debajo de las piedras, sino que la fiscalización a la gestión tiene que ver con poder hacer las cosas mejor”.
¿Cuáles serán sus primeras medidas?
Van en la misma línea de lo que ya estaba haciendo como concejala. Quiero hacer auditorías contables y forenses -para identificar posibles fraudes- en el municipio, pero también en las corporaciones, para que todos sepamos el estado del arte en el que nos encontramos. En seguridad presentaremos un plan cuadrante municipal, similar a lo de Carabineros, donde vamos a tener delegados municipales que van a estar en contacto permanente con las juntas de vecinos y con los comités de administración por área. Y en temas más de largo plazo, me gustaría poder implementar un laboratorio municipal de innovación de políticas públicas.
Como concejala usted impulsó y aprobó una auditoría. ¿Quiere profundizar en esos resultados?
Cuando esté el informe oficial podré referirme públicamente a esa auditoría que votamos como concejales, pero sí podría adelantar que hay cosas que tienen que ver más con procesos internos que tienen que mejorarse.
¿Qué elementos de continuidad tendrá su gestión?
La municipalidad tiene funcionarios que saben hacer la pega, que son leales, responsables y que han demostrado trabajar por los vecinos. En la entrevista anterior hablamos de cómo lo iba a hacer yo al ser independiente (para completar los cargos), y acá yo no necesito a los partidos. Necesito que los funcionarios municipales trabajen para los vecinos. Y, en esa línea, Najel Klein -actual secretaria de Planificación (Secplan) que se mantendrá con San Martín- es una excelente profesional que llegó al final de la administración de Daniela Peñaloza y que me demostró a mí y al resto de los concejales que es una profesional de primera línea.
¿Va a continuar como independiente? ¿No han existido tentativas de ficharla en algún partido?
Voy a seguir como independiente. Tengo buena relación con los partidos a través de los alcaldes (...). La verdad es que no he recibido ninguna propuesta formal, pero sí muy buenos deseos en la gestión. Mi independencia me permite dedicarme única y exclusivamente a Las Condes.
Pero ideológicamente se ubica en la centroderecha. ¿Se coordinará con Chile Vamos?
Por el momento el trabajo es con los vecinos, pero no descarto coordinarme cuando sea necesario con los partidos. Otro valor que tiene la independencia es que tengo la libertad de juntarme con quien yo quiera. Y puede haber personas en la otra vereda política que están resolviendo y haciéndoles mejor la vida a sus vecinos.
¿A quién destaca en ese sentido?
A mí el alcalde de Renca, Claudio Castro, me gusta mucho. Fui a visitar el centro de innovación La Fábrica que tienen en la comuna (...). Y con Tomás Vodanovic estuve hace poco en un foro, él ha hecho un muy buen trabajo en Maipú.
¿Quién es su referente municipal de su sector?
Camila Merino, sin duda, y Evelyn Matthei, quien ha sido una excelente alcaldesa durante estos ocho años.
¿Qué tiene en común con los otros alcaldes de derecha que triunfaron en esta elección?
Me siento parte de aquellas personas de centroderecha que comparten los principios de honestidad y transparencia en la administración. Entre ellos destaco a Agustín Iglesias, Sacha Razmilic, Luciano Valenzuela y Camila Merino. Pero sí me parece necesario dejar en claro que las generaciones no tienen por sí mismas escalas de valores distintas a las anteriores.
¿Cuál fue su opción para el gobierno regional?
El voto es secreto.
Pero sí sostuvo reuniones con Claudio Orrego y con Francisco Orrego...
Sí, me junté con ambos y estoy tremendamente agradecida de que hayan tenido la deferencia de reunirse, y les dije mis aprensiones respecto a cada uno (...). Creo, y esto es una autocrítica a mi sector, que deberíamos estar superatentos y preparados para los cargos de elección popular. En nuestro sector pasó que primero era Isabel Plá, después estuvo Rosa Oyarce (...). Eso muestra un desorden que para la ciudadanía no es confiable. Escuché alguna vez que alguien dijo que todos pensaron que esto (la Gobernación de la Región Metropolitana) estaba perdido. Si yo hubiese pensado que mi elección estaba perdida, no me habría postulado como candidata por Las Condes. Pero yo tenía la convicción de que estaba haciendo lo correcto. Aunque estuviera todo en contra. Yo invito a Chile Vamos a que tenga el arrojo que tuve en Las Condes si tiene la convicción de querer gobernar.
Pero Francisco Orrego sí tuvo la decisión de ir y competir en la papeleta por su sector. ¿Se refiere a que faltó un mejor casting de los candidatos?
Más que aptitudes, porque yo no me atrevería a decir desde afuera quiénes eran lo más aptos, faltó convicción por parte de quienes iban como candidatos inicialmente y también de los partidos, de decir ‘creemos en esto y con esto vamos hasta el final’. Francisco tomó la oportunidad que se le dio producto de todo esto que estaba ocurriendo e hizo lo que tenía que hacer en su momento. Pero acá hay una reflexión más profunda, más institucional respecto al rol que están cumpliendo los partidos en decisiones como esta.
¿Evelyn Matthei es su candidata presidencial?
Sí, es mi candidata presidencial. Ella representa el liderazgo que hoy Chile necesita, con diálogo, firmeza y honestidad.
Habiendo militado en Evópoli, ¿cree que Chile Vamos debe proclamarla pronto o realizar primarias?
Sin ser parte de las discusiones partidarias que pueden tener en Chile Vamos, acá hay una tremenda invitación para la derecha completa, de entender que hay que tener vocación para gobernar. La centroderecha debería estar pensando no solo en un período de cuatro años, sino que -por lo menos- en un período de ocho años. Y Matthei es un liderazgo transversal, que sabe hablarle a todo el país. Para mí sería un acto de tremenda generosidad que Chile Vamos entendiera que la candidata debe ser Evelyn Matthei. No hay nadie que esté generando ni marcando lo que marca su figura.