Columna de John Zogby: La carrera por la Casa Blanca en equilibrio

Kamala Harris
Propaganda electoral de la candidata del Partido Demócrata, Kamala Harris, en Tucson, Arizona. Foto: Reuters


Por John Zogby, analista político y encuestador estadounidense.

La carrera entre Joe Biden y Donald Trump siempre estuvo en equilibrio. Durante la mayor parte de los últimos seis meses, el expresidente mantuvo pequeñas ventajas, pero por lo general estas se encontraban dentro de los márgenes de error de las encuestas. Esas encuestas revelaron que, además de su sólida base de alrededor del 42% de los votantes, estaba logrando avances entre los votantes negros, hispanos y jóvenes, todos grupos que han sido esenciales para que los demócratas ganaran la Casa Blanca este siglo.

Los problemas de Biden se centraban en su edad y agudeza mental. A sus 81 años, ya mostraba algunos signos graves de declive. Esto le impedía dominar su mensaje sobre el crecimiento económico, los logros legislativos y la expansión de la atención médica. Su única tarea en el debate presidencial del 27 de junio con Trump era dejar de lado los temores incluso de sus partidarios más fervorosos, así como de los votantes, mostrar energía y capacidad para luchar contra Trump. Fracasó miserablemente.

El Presidente no tuvo más opción que retirarse de la manera más digna posible. El tiempo se estaba acabando y los demócratas necesitaban resolver este asunto de la manera más ordenada y transparente posible, especialmente porque Trump ha experimentando un ligero repunte en las encuestas tras el intento de asesinato y la Convención Republicana.

Algunos demócratas querían un proceso totalmente abierto con candidatos declarados, un debate político genuino y reuniones públicas. Eso podría haber tenido sentido en un momento anterior, pero a unos 100 días del día de las elecciones, el respaldo de la Vicepresidenta Kamala Harris tenía más sentido.

Ella tiene un sólido historial como fiscal, lo que la coloca en una posición interesante contra Trump. Difiere un poco de Biden en lo que respecta a Gaza, es más crítica con Israel y se pronuncia a favor de un alto el fuego total, que podría ganarse el apoyo de los votantes más jóvenes, especialmente los de color y los universitarios. Y ha estado a la vanguardia en la cuestión de los derechos reproductivos.

No nos engañemos, esta carrera está en equilibrio. Esto es lo que hay que tener en cuenta. Un candidato demócrata necesita llevar una ventaja de 3 o 4 puntos en las encuestas nacionales para tener la certeza de ganar. Hay muchos millones de votantes adicionales en estados grandes como California, Nueva York e Illinois, que distorsionan las encuestas nacionales. Y hay tres estados que un demócrata debe ganar: Wisconsin, Michigan y Pennsylvania.