Columna de Jorge “Coke” Contreras: Berizzo no convence

Berizzo
Eduardo Berizzo, técnico de la selección chilena. Foto: Andres Perez


Por Jorge “Coke” Contreras, ex seleccionado chileno

Berizzo no me termina de convencer. Veo con preocupación el futuro de la Selección. Las determinaciones que tomó en estos partidos me dejaron muchas dudas. De los dos compromisos, sacó adelante el que tenía la obligación, pero con Venezuela se pudo hacer algo más, independientemente de la tontera de Marcelino.

En Maturín todo se pudo manejar mejor. Venezuela fue superior después de la expulsión de Núñez, pero en la previa, la lectura y las decisiones no fueron acertadas. Y con Perú, tampoco. En ese partido tardó mucho en hacer una buena lectura del primer tiempo. La Roja fue superior y debió incorporar a un delantero. Estaba claro, pero Berizzo no lo hizo. Hay un detalle: cuando Aránguiz y Aravena estaban listos para entrar, justo Chile convierte el gol. ¿Qué pasó? El seleccionador los llamó, cambió la decisión inicial y terminó quitando un delantero. Con el 1-0… Eso me deja muchas dudas. Ha estado muy flojo.

Soy técnico y no me gusta que estén cambiando entrenadores, pero acá hay un tema de convencimiento. En los Panamericanos, Berizzo corre un riesgo grande si las cosas no le salen bien. Y no sé si hay tiempo para esperar. Quizás la tranquilidad la dan los seis cupos y medio que tiene Sudamérica para el Mundial. Tal vez eso frena una decisión.

Esperaba que este equipo se acercara a lo que mostró con Bielsa, pero no es así. Cuesta entender las decisiones del técnico. Es poco atrevido. Tiene un solo delantero, que juega por el sector izquierdo y no desnivela. Cuando se lesiona Valdés, recurre a Osorio, un jugador que no venía utilizando. Son cuestiones que, en el análisis final, llaman la atención. En definitiva, no se están consiguiendo los resultados. Ya no tenemos una Generación Dorada que nos pueda salvar; y a los que aún quedan, les está costando más. Para colmo, en la banca tampoco hay mucho.

Hay que tomar decisiones. Si van a salir las cosas mal, que salgan con un equipo atrevido, ofensivo. Es lo que la gente quiere. Lo que los mismos jugadores quieren.