Columna de Louis de Grange: Buses de dos pisos “guardados”

Buses dos pisos Chile
Buses transporte público de dos pisos. Foto: Ministerio de Transportes.


Por Louis de Grange, decano Facultad de Ingeniería y Ciencias UDP. Ex Presidente de Metro.

Una nota publicada por La Tercera hace algunos días atrás develó que los Buses de dos pisos -adquiridos recientemente por el Ministerio de Transportes (MTT)- están guardados. Frente a la consulta del periodista que publicó el artículo, la respuesta del MTT fue la siguiente (sic): “Tienen limitaciones de entorno, por la altura, las ramas de árboles y cables de servicios que pueden interferir y también están limitados por los pavimentos en mal estado”.

Estas evidentes dificultades que presentan los buses de dos pisos para circular en determinadas calles de la ciudad, así como también su inferior calidad de servicio (mayores tiempos de viaje y de espera, debido a que los pasajeros deben subir al segundo piso, lo que toma más tiempo), y sus mayores costos de adquisición y operación, habían sido advertidas con bastante anticipación por diferentes especialistas de la industria.

Cada uno de estos 10 buses de dos pisos costó cerca de US$ 560 mil, lo que sumados a otros costos de adquisición alcanzarían la suma total de seis millones de dólares. Este gasto fue financiado con subsidio estatal, vía trato directo a un operador del Transantiago/RED. A ello debe sumarse la dificultad en adquirir repuestos para dichos buses, ya que esta tecnología no opera en Chile, por lo que cada repuesto debe importarse, generando elevados costos y tiempo para su reparación.

Ninguna de estas obvias dificultades, que fueron advertidas con bastante anterioridad y en diversas ocasiones, les importaron a las autoridades de transporte. Por el contrario, se dedicaron a publicar fotografías en la prensa y videos actuados en Tik-Tok con estos nuevos buses. Lo importante para ellos fue mostrar supuestos “avances”, aunque en realidad son retrocesos, y financiados con recursos de todos los chilenos.

Creo que el MTT debe una explicación, en particular a los habitantes de regiones, quienes con sus impuestos financian proyectos panfletarios como los buses de dos pisos que hoy “están guardados mientras se afina un nuevo recorrido”.