Por Óscar Inostroza Orellana, Director Liceo Agrícola y Forestal Suizo La Providencia, Traiguén.
El domingo 23, tipo 14:00, iba saliendo del Liceo Agrícola y Forestal Suizo La Providencia, en Traiguén, cuando nos llamó la atención un extraño cielo celeste con algo de humo. A los minutos divisamos una nube muy fea, como un tornado que se venía acercando al colegio y como a unos tres kilómetros unas llamaradas de fuego. Había viento puelche, que hace mucho tiempo no aparecía.
El asunto es que hicimos sonar la alarma del colegio y reunimos a los menores de nuestro internado. En ese momento eran 21 niños y cuatro niñas, todos de enseñanza media. Les dijimos que estuvieran tranquilos y los evacuamos en el bus del liceo y en otro de la municipalidad.
Nuestro liceo ocupa seis manzanas y es como una pequeña ciudad. Fue fundado en 1893, es particular subvencionado y atendemos a 125 estudiantes. Recibimos a niños con 100% de vulnerabilidad de zonas rurales de Cañete, Capitán Pastene, Lumaco, Los Sauces, Lonquimay, Victoria, Curacautín, Vilcún, Galvarino y sectores aledaños. Por suerte, los estudiantes no vieron cómo se quemaba su colegio.
Cuando las llamas llegaron a nuestro liceo agarraron primero el generador eléctrico y los restos de petróleo que había ahí. En segundos se inflamó todo y fue como un efecto dominó: el fuego arrasó con el taller de herramientas, después pasó al comedor de los niños -que es como una cancha de baby fútbol-, luego a la cocina y de ahí hacia el edificio histórico, de tres plantas de madera y 132 años de historia. Después se quemó la lavandería, con 500 frazadas. Y también la lechería, el establo y unos 2.500 fardos que habíamos sacado de la temporada. Las llamas arrasaron después con nuestra despensa.
De milagro se salvaron las salas, la parte del internado con 450 camas disponibles y los baños. Nuestra Aula Magna, con capacidad para 500 personas, y el gimnasio también se salvaron. Queremos retomar las clases este lunes. Hemos recibido donaciones, pero bajitas. Se han acercado muchas autoridades, pero ojalá no sea para la foto.