Por Rosendo Fraga, Director del Centro de Estudios Unión para la Nueva Mayoría
La política argentina se consolida en tres espacios, pero las líneas ideológicas son cuatro. Electoralmente, están definidos el Frente de Todos por el oficialismo, Juntos por el Cambio en la oposición, y Libertad Avanza por la oposición extrema. Se puede definir como una fuerza progresista a la primera, de centroderecha a la segunda y de extrema derecha la tercera. Fue Mauricio Macri quien consagró el rol de Javier Milei como tercer espacio competitivo, cuando dijo que la segunda vuelta de la elección presidencial estará entre Juntos por el Cambio y Milei. Pero ideológicamente, el Frente de Todos puede definirse como una fuerza de centroizquierda y Libertad Avanza como una expresión política local de lo que representan Trump, Bolsonaro y el partido Vox de España.
La renuncia a su candidatura de reelección del Presidente Alberto Fernández no modifica este cuadro. Pero un oficialismo más complicado siempre favorece a la oposición.
En cuanto a Juntos por el Cambio, coexisten dentro del mismo en realidad dos proyectos ideológicos distintos. El de Horacio Rodríguez Larreta puede ser definido como un espacio de centro, con un perfil socialdemócrata. En cambio, el que encabeza Patricia Bullrich con el apoyo de Macri, como de centroderecha con orientación conservadora. Esta división se hace aún más nítida en la Ciudad de Buenos Aires, donde en el marco de Juntos por el Cambio, compiten por ahora para la Jefatura de Gobierno Martín Lousteau, con apoyo de Larreta de hecho y el radicalismo, y Jorge Macri, con el respaldo de su primo, el expresidente, y de Patricia Bullrich.
Si bien los resultados de elecciones provinciales y municipales como las de Neuquén y Río Negro no pueden trasladarse al plano nacional, sirven para sacar algunas conclusiones de interés. Pero se advierte un fraccionamiento creciente. Los dos espacios políticos principales, el Frente de Todos y Juntos por el Cambio, se presentaron muy atomizados.
Respecto a Javier Milei, obtuvo resultados por debajo de los que muestran los sondeos a nivel nacional. Tiene todavía una estructura débil en el interior y cuando su propia candidatura no está en juego, el interés de sus votantes disminuye. La concurrencia a votar en general fue baja. En de mayo se realizarán nueve elecciones de gobernador. Serán nuevos anticipos de la primera vuelta de las presidenciales del 22 de octubre.