Por Ruth Campaña, periodista ecuatoriana y directora de la fundación Círculo de Periodistas Judiciales de Ecuador
Casi sin confrontaciones. Esa fue la tónica de la campaña para las elecciones anticipadas en la segunda vuelta de Daniel Noboa Azín, de Acción Democrática Nacional (ADN). El hijo del empresario bananero Álvaro Noboa, a quien la Presidencia de la República le fue esquiva en sus cinco intentos, logró el domingo pasado convertirse en el futuro Mandatario de Ecuador para completar el período de Guillermo Lasso. Obtuvo el respaldo del 51,83%. Derrotó así al correísmo, representado por Luisa González, candidata de Revolución Ciudadana, quien obtuvo un 48,17 %. A sus 35 años, Daniel Noboa se convirtió en el Presidente más joven en la historia del Ecuador.
El nuevo Presidente ecuatoriano se inició en la política hace solo dos años. Fue electo asambleísta por la provincia costera de Santa Elena y posteriormente fue presidente de la Comisión de Desarrollo Económico, una de las más importantes del Legislativo.
Noboa rompió todos los pronósticos de las encuestadoras en el país. Fue el debate de primera vuelta el que lo colocó en el radar de los jóvenes. Logró posicionarse y captar el voto joven por su intervención alejada de los insultos, confrontación, con mensajes cortos y la imagen de un hombre tranquilo y sereno. Evitó caer en enfrentamientos con el correísmo y el anticorreísmo. Su presencia en redes sociales fue también importante. Abonó en ese camino la notoriedad de su esposa, la influencer y nutricionista ecuatoriana Lavinia Valbonesi, quien aportó en el crecimiento de su popularidad.
El futuro Presidente afronta un complejo panorama en un país convulsionado por la inseguridad, la violencia, el crecimiento del narcotráfico, la falta de medicinas en las casas de salud y la crisis política. Entre sus temas más urgentes están reducir la violencia, la reactivación económica y generación empleo. De momento, ya iniciaron las primeras reuniones para la transición. Noboa y su equipo, la mayoría empresarios, ya tuvieron un encuentro con Lasso en el Palacio de Carondelet.
Noboa dispondrá de casi 15 meses para ejecutar un plan de gobierno en el que los votantes, especialmente los más jóvenes, han puesto sus esperanzas en educación, salud, reducción del desempleo y, fundamentalmente, en seguridad.