Experto en gobernabilidad democrática y reforma electoral, Daniel Zovatto es director regional para América Latina y el Caribe del Instituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral (IDEA Internacional), una organización intergubernamental que apoya la democracia sostenible en todo el mundo. En esta entrevista con La Tercera, Zovatto aborda los alcances del proyecto para restituir el voto obligatorio en Chile.
¿Esta iniciativa resuelve el tema de la baja participación electoral?
Se trata de una discusión muy necesaria. Las cifras de participación electoral de Chile en los últimos años son preocupantes. En ese sentido el voto obligatorio puede ser un primer paso para intentar reconectar a la ciudadanía con la política electoral, pero no necesariamente va a ser suficiente. Esto debe ir acompañado de formación ciudadana, campañas comunicacionales potentes con foco en ciertos grupos que participan menos, como los jóvenes, y también medidas para aumentar la legitimidad y confianza de las instituciones políticas, donde el proceso constituyente puede ser una oportunidad para esto último. Además, hay que pensar bien cómo se diseñará este sistema, si irá acompañado de incentivos o de sanciones y cuáles serán.
En Perú el voto es obligatorio, pero en la primera vuelta presidencial del 11 de abril casi el 30% no acudió a las urnas, superando cifras de las últimas décadas. ¿La obligatoriedad no garantiza entonces participación?
El ausentismo electoral en Perú ha ido en aumento en las últimas décadas y alcanzó su nivel más alto este año en medio de una avasalladora segunda ola de la pandemia. Un elemento en la disminución de la participación electoral puede ser el incremento gradual de la desconfianza en partidos y políticos lo que ha incrementado también el desinterés en la política. Pero puede estimarse que el elemento más fuerte en ese cambio es el impacto de la pandemia del Covid-19.
¿Qué tipo de voto predomina hoy en América Latina?
En general en América Latina predomina el voto obligatorio. Sin embargo, en algunos países las sanciones son más bien simbólicas o incluso no se materializan y en otros, como Ecuador y Perú, sí son efectivas. En países como Argentina, Costa Rica o Paraguay las sanciones son mínimas o inexistentes y tienen tasas de participación electoral por sobre el 60% e incluso en Argentina cercanas al 80%.
¿En los últimos años la región ha girado más hacia la obligatoriedad o voluntariedad del voto?
La tendencia mundial, según los datos de IDEA Internacional, es que el voto sea voluntario. Eso impera en África, Europa y Asia. En cambio, en la región es al contrario, la mayoría de los países tiene sistemas de voto obligatorio. Sin embargo, en algunos países no hay sanciones por su incumplimiento y en otros, sí. Además, las cifras indican que los países con voto obligatorio, en promedio, tienen un 7% más de participación que aquellos donde es voluntario.
¿Cómo ha evolucionado la participación electoral en la región en los últimos años?
En América Latina, en general la participación en elecciones presidenciales es de un promedio de 66%. Solo Chile y Venezuela registran una participación menor a la mitad de las personas habilitadas y, junto a Colombia, Honduras, El Salvador y República Dominicana, están bajo un 60%. Al otro lado tenemos países como Uruguay y Bolivia con cifras cercanas al 90% en las últimas elecciones presidenciales.