Elecciones 2024: las zonas que preocupan al oficialismo y la oposición
Con la campaña ya iniciada, comenzó la hora de los balances. En cada bloque han identificado a los candidatos que se han debilitado y a aquellos que tienen pocas posibilidades de resultar electos, ya sea por la amenaza de independientes o por ser poco competitivos.
A 35 días de las elecciones de gobernadores, alcaldes, concejales y consejeros regionales, los partidos políticos -de oficialismo y oposición- examinan detalladamente los escenarios electorales a los que tendrán que enfrentarse. En ese ejercicio, han identificado algunas comunas y regiones en las que, según sus propios cálculos, los candidatos que designaron o que ganaron las primarias en junio están complicados.
Desde un comienzo de la carrera municipal, los partidos del oficialismo han dado por hecho que sus candidaturas en el sector oriente de la Región Metropolitana -Constanza Schonhaut (Frente Amplio) en Las Condes, Juan Carlos Urzúa (Partido Liberal) en Vitacura y Marilén Cabrera (Acción Humanista) en La Reina, entre otras- no tienen posibilidad de salir electas y que son postulaciones más bien testimoniales, que podrían favorecer al sector en las parlamentarias del próximo año.
Más allá de esos casos, que son los más evidentes, el pacto Contigo Chile Mejor -que agrupa a los ocho partidos de gobierno y a la Democracia Cristiana (DC)- también ve con preocupación el resultado que podrían obtener en Concepción, donde el candidato de la alianza es el falangista Aldo Mardones.
Aquí los partidos han identificado que el independiente Camilo Riffo -quien ha tenido acercamientos con el Frente Amplio- tiene altas posibilidades de salir electo. De ser así, pondría fin a los 12 años de hegemonía de la DC, de la mano del alcalde Álvaro Ortiz, hoy impedido para ir a la reelección.
Concepción es una comuna que también complica a Chile Vamos (coalición que agrupa a la UDI, RN y Evópoli). Fuentes del bloque aseguran que la campaña se ha ido poniendo cuesta arriba debido a la cantidad de candidatos de derecha que compiten por el municipio. Mientras que la coalición lleva a Valentina Pavez (UDI) -hija de la exsenadora Jaqueline van Rysselberghe-, en republicanos levantan la candidatura de James Argo y en el Partido Social Cristiano (PSC), a Héctor Muñoz.
Así, el temor por la zona ha aumentado, en un contexto en que, además, Argo se ha mostrado como el candidato más fuerte de la oposición y el Partido Republicano lo ha definido como una de sus cartas prioritarias.
Otro caso complejo para el oficialismo es La Araucanía, donde su postulante único a gobernador es el frenteamplista Luis Penchuleo. En la alianza comentan que de por sí esta es una zona compleja para la izquierda, pero estos comicios tienen una dificultad más: la postulación al cargo del independiente René Saffirio (exdemocratacristiano), quien cuenta con el respaldo del Partido Liberal.
No solo el oficialismo enfrenta un escenario difícil en La Araucanía. En Chile Vamos, la situación judicial que afecta al actual gobernador y candidato de la coalición, Luciano Rivas, también ha dificultado la campaña. El tema, dicen, no es menor, considerando que actualmente Rivas es el único gobernador del sector, por lo que en el bloque apuestan a su reelección.
Lo cierto es que la elección se ha ido poniendo cuesta arriba después de que -en el marco de la investigación por el caso Manicure- fuera detenido el exjefe de gabinete de Rivas, Juan Pablo Leonelli.
Así, durante la semana pasada el gobernador sufrió sus primeros descuelgues públicos, esto después de que el consejo regional de Evópoli en esta circunscripción definiera dar libertad de acción para respaldarlo.
Algo similar ocurre en Arica y Parinacota, donde el Partido Socialista abiertamente apoya la reelección del gobernador Jorge Díaz (DC). Esto, pese a que el Partido Comunista -que comparte pacto con el PS, el PPD y el Frente Amplio en el caso de los gobernadores regionales- presentó como candidato por la Gobernación Regional a Carlos Yévenes. Además, buena parte de los socialistas tampoco respalda la reelección del alcalde de Arica, Gerardo Espíndola, del Partido Liberal, y apuestan por apoyar al exdiputado Orlando Vargas, quien aspira a llegar al sillón municipal.
En el oficialismo perciben como una candidatura débil a Luis Escanilla (Partido Socialista) en Puente Alto -donde el candidato deberá enfrentar a la exministra Karla Rubilar y al independiente Matías Toledo, quien juntó más de seis mil firmas para competir.
También ven en riesgo a la concejala Carolina Rojas (PPD) -quien se enfrentará a Maximiliano Luksic y pondrá en juego los 12 años de hegemonía del Pepedé ahí, de la mano de Carlos Cuadrado. En esa misma categoría ubican a la concejala Macarena Fernández (Frente Amplio) en Providencia, quien estuvo en el ojo del huracán por su valoración a la gestión del exalcalde Cristián Labbé -debió pedir disculpas- y tendrá que medir fuerzas con Jaime Bellolio (UDI).
Bellolio es una de las principales apuestas de Chile Vamos. Y es que se espera que el exministro suceda a la alcaldesa Evelyn Matthei, quien decidió no ir a la reelección para enfrentar eventualmente la presidencial. Por lo mismo, en el bloque creen que es clave que se imponga por un margen importante de votos, con el fin de evitar cuestionamientos a la actual jefa municipal.
Otra gobernación que complica a Chile Vamos es la de Los Ríos, donde llevan a Omar Sabat (UDI). El candidato gremialista ganó por amplia mayoría la encuesta que realizó la coalición, por lo que se tenía expectativa de que pudiese sumar una nueva gobernación. Sin embargo, Sabat está ad portas de ser formalizado por conducir en estado de ebriedad, lo que le ha costado algunos respaldos, como el de la senadora de la región María José Gatica (RN).
Los Ríos, además, es una de las regiones donde los republicanos llevarán candidato, por lo que fuentes de los partidos adelantan que la dispersión de votos podría complicar más a Omar Sabat. De hecho, desde esa colectividad han llamado a la UDI a bajar su candidatura y que así la carta del sector sea la republicana Carolina Zúñiga.
Antofagasta, en tanto, es otra de las comunas en que la presencia de varios candidatos de derecha ha complicado al bloque. Allí, mientras la coalición lleva a Sacha Razmilic (Evópoli), los republicanos a Roberto Soto y los socialcristianos a Eslayne Portilla. A ellos tres, además, se suma la candidatura de Luis Aguilera, ex RN, que va como independiente.
Viña del Mar es otra de las zonas donde han bajado las expectativas de algunos en el sector. Allí, explican fuentes de la coalición, más allá de las encuestas en donde reconocen que su candidato Iván Poduje (Ind.) no ha podido sobrepasar a la actual alcaldesa Macarena Ripamonti (Frente Amplio), la campaña del arquitecto ha dejado en duda la posibilidad de recuperar el municipio. De todas formas, en el oficialismo temen que el retraso en la reconstrucción del megaincendio de esta comuna termine por perjudicar a su carta.
En la zona, algunos en el bloque miran con distancia la estrategia más confrontacional que ha asumido Poduje durante la campaña que, según sostienen, ha permitido que Ripamonti se estabilice de cara a los comicios. Otros, en todo caso, apuntan a que la actual jefa municipal ha aprovechado la plataforma que le entrega la municipalidad para la campaña. Algo que, de hecho, ha sido denunciado en varias ocasiones por Poduje y creen podría favorecerle.
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