Sentada al estilo indio en su despacho en la Municipalidad de Santiago, donde se cuela el ruido de una agitada tarde de viernes 25 de febrero en Plaza de Armas, la alcaldesa Irací Hassler (31) cuenta que durante este verano se reunió con las comunidades educativas (familias) de los 44 establecimientos de su comuna, donde recogió una sola postura ante el inicio del año escolar que parte este martes: “Hay una voluntad muy amplia en todas las comunidades para que sus hijos tengan clases presenciales”.
-Esto, pese al aumento de hospitalizaciones de niños por Covid-19.
-Vamos a estar siempre en diálogo tanto con la autoridad educacional, de hecho ya hablé con el ministro entrante, como la sanitaria, pero estos meses nos hemos preparado con mucho trabajo y dedicación para poder contar con las mejores condiciones de seguridad para el inicio del año escolar en forma presencial. Hicimos 56 reparaciones en algunos establecimientos, como la Escuela Cervantes, donde por ejemplo, no había agua potable, además de mejorar la conectividad de internet.
-Usted polemizó con su par de Recoleta, Daniel Jadue, quien la semana pasada señaló que no estaban las condiciones para volver a clases presenciales en marzo.
-Yo no polemicé con Jadue. Un periodista me preguntó si en Santiago teníamos las condiciones (para tener clases presenciales), y yo le explique, al igual como le dije a usted, que sí, porque nos hemos preparado mucho por la importancia que tiene el proceso pedagógico.
-Otro de los temas que ha estado sobre el tapete es el del uniforme escolar, ¿cuál es su postura al respecto?
-Enviamos una circular a todas las comunidades educativas instruyendo la flexibilidad en el uso de uniforme, porque no queremos que haya nada que sea un obstáculo para que los niños, jóvenes y adultos que también que se forman en nuestros liceos, puedan asistir a clases. También estimo que es necesaria una mayor flexibilidad en los horarios de entrada, salida, y duración de la jornada escolar, porque el protocolo que generó el gobierno saliente ha sido muy rígido.
-Usted ha dicho que su desafío es transformar a mixtos los nueve colegios (seis liceos y tres escuelas) monogenéricos de la comuna. ¿Cómo va ese proceso?
-Creamos una unidad de género en la Dirección de Educación Municipal que está llevando, por un lado, el proceso de educación no sexista, que fue aprobado unánimemente en cada comunidad educativa, así como la prioridad de una educación sexual integral y, junto con ello, generar las condiciones para que todos nuestros establecimientos sean plurigenéricos. Vamos a avanzar todo lo que podamos.
Aumento de comercio ambulante
-A pasos de aquí (municipalidad) se está discutiendo la nueva Constitución (ex Congreso), y a cuadras vivirá el presidente electo Gabriel Boric (barrio Yungay). Sin embargo este mismo entorno está hoy invadido por el comercio ambulante y se aprecia un constante deterioro en sus calles. ¿Cómo se entiende este contraste?
-Yo creo que Santiago, en estos últimos cuatro años, sufrió mucho deterioro. La Subsecretaría de Prevención del Delito, por ejemplo, entrega hoy cerca de $ 40 millones al municipio de Santiago, y en periodos anteriores, como el de Michelle Bachelet y Carolina Tohá, éste llegaba a mil millones anuales. Pero tenemos la convicción que vamos a recuperar nuestros barrios con mucho trabajo con los vecinos. Ya partimos con un plan verano, con cine en los parques, escuelas y calles abiertas que busca que la comunidad vaya apropiándose nuevamente de los espacios que le pertenecen.
-Pero en la administración anterior no se apreciaba tanto comercio ambulante como ahora, ¿cree que los comerciantes ilegales pudieron haberse relajado con la llegada de una alcaldesa comunista, creyendo que habría menos fiscalización y más permisividad?
-No lo creo. De hecho hemos creado una nueva unidad de fiscalización que está trabajando junto a las autoridades que tienen la responsabilidad del orden público. El avance del comercio ambulante es un tema que hoy enfrentan todos los municipios de nuestro país y que efectivamente se expresa también en la comuna capital.
-¿Cuál es su plan para enfrentarlo?
-Lo estamos abordando en dos ámbitos. Con mayor fiscalización, donde siempre es importante señalar que el rol principal lo tiene que llevar adelante el Ministerio del Interior con las policías. Y desde la perspectiva de generación de alternativas de empleo, porque nos parece que hay un problema de fondo, que es la falta de empleo decente en nuestro país, y en ello, juegan un rol importante el Estado en su conjunto, el mundo empresarial, y sin duda nosotros como municipio. Por eso, a través de nuestra oficina de intermediación laboral en los últimos meses hemos colocado a 284 personas en un empleo formal. También estamos trabajando en proyectar distintos espacios, tanto mercados, como plazas de bolsillo, que puedan acoger al comercio ambulante. Espero poder contar pronto cuáles serán esos lugares.
-¿Cómo ha sido su relación con Carabineros?
-Hemos tenido una buena relación, al igual que con la PDI. Sin embargo, creo que lo que falta es una orientación política hacia las policías que ha estado ausente en este gobierno. Creo que eso está en el fondo de la actual situación de inseguridad en nuestro país, con 2,5 homicidios diarios.
-¿Qué espera del gobierno de Boric?
Como le decía, que exista una orientación hacia Carabineros, porque hay situaciones, como ocurrió durante el estallido social, donde me parece que hubo un actuar desmedido, así como también muchas veces una inhibición que también es relevante que podamos abordar. Tenemos una muy buena relación con el presidente electo y tengo mucha esperanza en el trabajo que podemos hacer en conjunto en Santiago. Paralelamente, seremos (el PC) un partido que va a aportar mucho a este gobierno, desde la experiencia profesional, como también desde el vínculo que tenemos con distintas comunidades organizadas.