Sus anteojos y sus calcetines son verdes. Y él también, deja en claro. El diputado Jaime Mulet, quien encabeza la Federación Regionalista Verde Social, explica que si bien es parte de la alianza de gobierno, tiene posturas distintas a colectividades como el PS y el PC. Por lo mismo, es partidario de llegar a la primaria, incluso si Michelle Bachelet compite.
También es un firme defensor de que el sector compita en dos listas parlamentarias, pese a que el Presidente Gabriel Boric instó a la máxima unidad.
Ha dicho que, con o sin Bachelet, es partidario de ir a primarias. ¿Por qué?
Porque nos permite una discusión de manera más franca con la ciudadanía, donde se vean los matices de los distintos partidos. Yo no soy socialista, soy regionalista verde.
¿Tiene sentido poner a competir a una candidata con una competitividad probada?
Tiene sentido. El partido me ha encargado exponer las propuestas programáticas que desarrollamos. El escenario más probable es que gane Bachelet, pero yo aprendí hace mucho tiempo que en política no hay adversario pequeño y las cosas a veces cambian.
En la alianza advierten que se pierde el objetivo de la primaria al presentar candidatos que usen la plataforma para llegar al Congreso. ¿Usted cabe en eso?
Yo he llegado al Congreso en cinco oportunidades. Mi objetivo es salir del Congreso, llegar a la Presidencia. Yo no voy a ir de candidato parlamentario seguramente. Ya he sido cinco veces diputado.
Atacama escoge senadores...
No me motiva generar una apuesta presidencial para ir de candidato a senador, creo que eso degrada. Yo voy de candidato a Presidente a una primaria y ya veré qué pasa después.
Entonces no descarta que después sea candidato a senador...
Es que no descarto nada, ni ser Presidente ni ser candidato a senador.
Eso es lo que se critica, que se deje la puerta abierta.
Eso es lo habitual, pero yo no soy muy habitual para hacer política. He estado en el Congreso 20 años, creo que es suficiente.
¿Por qué no cierra la puerta?
Lo veré más adelante, pero no es mi meta. Quiero ser claro en eso. Si me pone en una elección binaria, diría que cierro la puerta.
¿Su candidatura no cae en lo testimonial?
Eso se va a ver en el resultado. Yo creo que si tenemos espacio para dar a conocer nuestras propuestas, no va a ser testimonial.
¿Le gustaría que Bachelet compita?
Creo que sí, Bachelet le pone otro sabor a la primaria, y nos permite al resto de los candidatos una visibilización.
El Presidente solicitó en octubre competir en unidad, pero usted trabaja por una posible segunda lista parlamentaria. ¿Por qué?
En esa misma reunión le dije al Presidente que no había problemas si nos poníamos de acuerdo en diciembre a más tardar. No sucedió, de manera que no me siento en falta con él.
¿Por qué una segunda lista?
Hay dos razones: una de orden programático, ideológico. Acá hay dos mundos: uno más hacia la centroizquierda y otro más hacia la izquierda. No es lo mismo ser comunista que ser regionalista verde. Y la otra, de orden práctico: nos permite ensanchar el arco para competirle a una derecha que seguramente va a ir dividida.
El diputado Alberto Undurraga ha dicho con seguridad que no va a haber una lista única. ¿Coincide con él?
Estoy de acuerdo con él. Es muy difícil poner de acuerdo a nueve partidos en una cantidad estrecha de cupos. Los partidos pequeños, medianos como nosotros, queremos competir, queremos crecer. No se hacen daño con dos listas bien hechas en materia de diputados y un acuerdo por omisión en senadores.
¿Es tema para ustedes pactar con el PC en términos ideológicos?
No, hemos sido socios electorales. Pero hoy hay una cosa que me dificulta la relación con el PC: la postura que mantienen respecto al régimen de Venezuela. La respeto, pero me genera una distancia, porque hoy nadie duda que es una dictadura.
Pero su partido no tuvo problemas para proclamar a Alejando Navarro como candidato a gobernador, quien ha defendido el régimen durante años...
Estoy de acuerdo con usted.
¿Fue un error llevarlo como candidato?
No, él no iba como candidato a Presidente ni a canciller. Su apoyo a Maduro hace muchos años, y antes a Chávez, es cierto. El régimen ha ido evolucionando. Antes la gente lo discutía, había gente del Frente Amplio que defendía a Maduro, pero eso cambió. Hoy día es evidente que es una dictadura.
En caso de que gane la Presidencia, ¿con quiénes gobernaría? ¿Incluiría al PC?
Yo creo que sí.
Pero no los pondría en la Cancillería.
El PC hace una contribución estando en el gobierno, pero obviamente no los pondría en la Cancillería. Y sin duda le pediría que cambie su postura respecto a Venezuela. No podría tener en mi gobierno un partido que apoye a Venezuela si sigue siendo cómplice pásivo de situaciones delictivas en Chile.
¿Su gobierno sería una continuidad de la administración de Gabriel Boric?
No, no. Un eventual gobierno nuestro parte de este momento político, pero evidentemente no es continuidad.
¿Se siente cómodo en el gobierno?
La mayoría de las veces, sí. Hay aspectos donde creo que se ha andado lento, como en materia de inmigración. Yo, si soy Presidente, voy a hacer un pronunciamiento público hacia Latinoamérica, decir que el país no puede recibir más inmigrantes. Lo primero es la señal política, que no se ha dado. Hay un legítimo sesgo ideológico de una persona de izquierda.
¿En qué nota ese sesgo?
En la política de inmigración. Yo no tendría problema en endurecer las relaciones con Bolivia, que es un colador de camionetas robadas, de inmigrantes. En materia de segurida, la ministra Tohá anda muy bien, pero faltan señales. Por ejemplo, una cárcel de seguridad yo la haría en medio del desierto.