Cuando Gabriel Boric se ponga la banda presidencial este viernes 11 de marzo, los partidos del Frente Amplio (FA) se convertirán en la coalición más importante del arco político. Convergencia Social, Revolución Democrática, Comunes y los movimientos Unir y Fuerza Común serán la base de apoyo del nuevo mandatario y de su gobierno, que hoy no cuenta con mayorías en el Congreso para impulsar sus reformas.
Hoy, el FA alcanza 23 parlamentarios en la Cámara, los que se suman a los 14 electos del Partido Comunista y el FRVS. Así, en los días previos a esa instalación, en la administración entrante visualizan un flanco en los partidos más jóvenes de Apruebo Dignidad que constituyen la coalición: la necesidad de robustecer sus directivas y orgánicas internas para asegurar la estabilidad del gobierno.
“Es primera vez que seremos un partido de gobierno y no uno opositor y eso implica un desafío mayor”, señala un dirigente de Revolución Democrática (RD).
La certeza de una responsabilidad mayor es una visión compartida también en Convergencia Social y Comunes. Estos dos últimos partidos tienen que elegir nuevas mesas directivas en los próximos meses, mientras que en RD se iniciará un proceso de reflexión interna durante marzo.
Frente a esta preocupación, el gobierno ha transmitido ciertos criterios “deseables” para la elección de nuevas directivas: que, en lo posible, las tiendas sean dirigidas por parlamentarios y así asegurar el orden de la bancada, con miras a un Congreso con poco espacio para descuelgues.
Nuevos estatutos
Durante este fin de semana, los militantes de Convergencia Social -el partido del Presidente Boric- someterán a votación una “reforma corta” de nuevos estatutos que apuntan, en su núcleo, a ampliar los nueve cupos de la mesa directiva a 13, a posponer la elección interna para los meses entre mayo y junio y asegurar criterios de paridad en la conformación de la dirección nacional.
Con miras a la profesionalización del partido -aunque no está plasmado en estos cambios- se buscará remunerar a algunos cargos de la mesa para que cuenten con dedicación exclusiva.
Desde que Alondra Arellano suspendió sus funciones como presidenta de la tienda para enfocarse en su campaña a diputada por el distrito 14, la subrogancia fue asumida por Francisca Perales, quien fue designada por el gobierno entrante en la Subsecretaría de Servicios Sociales.
Con ello -y sin que Arellano haya resuelto reasumir tras la elección- actualmente la dirección nacional interina está en manos de Javiera Menay.
Desde la tienda comentan que para las próximas elecciones existe el “espacio” para una candidatura de consenso, cercana al sector minoritario dentro del partido al que pertenece Boric. Si bien en un momento sonaba el nombre del diputado Gonzalo Winter (de la corriente interna “Desbordar lo posible”), hoy corre con ventaja el parlamentario Diego Ibáñez (“De cordillera a mar”, cercano a los primeros).
El mayor desafío para ese hito está en convocar a los militantes que ingresaron al partido en el proceso de búsqueda de firmas para la candidatura de Boric. Es decir, afinar el nuevo padrón.
Reestructuración en Comunes
Tras la renuncia del timonel de Comunes, Jorge Ramírez, posterior al escándalo por los dineros utilizados durante la campaña de primera vuelta a gobernadora regional de Karina Oliva, el mando está en manos de una dirección nacional interina liderada por la concejal de Maipú, Ka Quiroz.
La principal tarea de la mesa es llevar a cabo las elecciones -fijadas para mayo- y una vez que esté conformada la nueva directiva, iniciar un “congreso refundacional”. Uno de los puntos a tratar, comentan desde el colectivo, es plasmar la probidad y la transparencia como bases fundantes del partido, e ir dejando atrás el período de Ramírez.
Al interior de Comunes no comparten que sea necesariamente un congresista quien lidere la tienda. Algunos apuntan a que las discusiones internas terminan “parlamentarizándose” y alejándose de puntos como la inserción territorial. Así, es probable que ante la elección de mayo, exista un nombre de consenso para liderar la colectividad.
10 años de RD
En el caso de la directiva de RD -liderada por Margarita Portuguez-, asumida el año anterior, aún tienen tiempo de mandato. Sin embargo, ya se ha planteado la idea de hacer una “elección complementaria” tras la instalación del gobierno, pues varios militantes -representados en la directiva y el consejo político- han asumido o asumirán cargos de gobierno.
Eso sí, la decisión final se adoptará una vez que termine el proceso de nombramientos, aproximadamente en el mes de abril.
Por otro lado, con motivo de los 10 años de existencia de RD, durante marzo se iniciará un proceso de reflexión interna. Su secretario general, Sebastián Depolo, plantea que “junto al proceso de instalación, delinearemos nuestra política y agenda como partido de gobierno. Tenemos que pensar cómo serán los próximos 10 años, cómo contribuimos a ser una fuerza política que materialice las transformaciones”.