Con miras a los desafíos electorales que vienen a partir de este año, en la oposición ya se desataron las conversaciones para alcanzar algunos acuerdos.
En este escenario, y pensando en el futuro del sector, el expresidente Sebastián Piñera planteó, en entrevista con La Tercera, que “Chile Vamos debe aspirar a buscar alianzas desde la derecha republicana hacia el centro, Amarillos, Demócratas y hacia la sociedad civil, los independientes”.
Posteriormente -en una segunda entrevista con este medio, el domingo pasado-, subió la apuesta para unir a la oposición. “Primero, que dentro de la oposición, y en esto incluyo desde el centro, Chile Vamos y Partido Republicano, logremos un acuerdo con las bases esenciales de una alianza política al igual que lo hizo la centroizquierda para recuperar la democracia”, añadió.
El llamado de Piñera, además, se dio en un contexto en que el oficialismo se unió desde la Democracia Cristiana al Partido Comunista para explorar fórmulas de cara a las elecciones. Incluso, el timonel de la DC, Alberto Undurraga, ha hecho gestiones con el Ejecutivo para destrabar la reforma de pensiones.
Esta unidad en las fuerzas de centroizquierda supone una presión adicional a la oposición. Pese a eso, en Chile Vamos miran con distancia el llamado de Piñera, donde analizan los pros y contras de una alianza de ese tipo. La secretaria general de la UDI, María José Hoffmann, afirma que se deben hacer “todos los esfuerzos por enfrentar unidos a la izquierda”.
La dirigenta, además, sostiene que “las últimas elecciones han contribuido a construir esas confianzas, pero hay mucho que conversar todavía”.
El senador y jefe de bancada de la UDI, Gustavo Sanhueza -que participa de las reuniones de la directiva- , afirma que “los pros de tener grandes alianzas es que cuando hay mínimos comunes entre los partidos que aspiran gobernar, sirve para darle mayor estabilidad al país. Los contras es formar este tipo de alianzas, cuando no hay convicciones, ni el respeto a cumplir los acuerdos”.
Ejemplo de lo anterior, agrega Sanhueza, es “este falso pacto al interior del gobierno de Boric, entre el Socialismo Democrático y Apruebo Dignidad, donde la convivencia es imposible”.
De igual manera, Sanhueza señala que está de acuerdo con la idea de una gran coalición, insistiendo “en la importancia de cumplir ciertos mínimos comunes y la palabra empeñada. Sin extremismos ideológicos, ya que el país lo necesita para salir del estancamiento”.
En la directiva UDI, en todo caso, transmiten que están de acuerdo con la premisa de que los partidos de centroderecha actúen unidos, sin embargo, que eso no necesariamente debe decantar en una coalición.
Desde RN, el senador y vicepresidente del partido, José García Ruminot, asegura que “siempre he creído que nosotros en la oposición debemos hacer algo muy parecido”. Lo anterior, en relación a la reciente unificación de fuerzas del oficialismo, que va desde el Partido Comunista a la Democracia Cristiana.
Los diputados de esa colectividad, en todo caso, se encuentran divididos sobre la idea de Piñera. El jefe de la bancada de RN, Frank Sauerbaum, por ejemplo, ayer envió un comunicado en el cual cuestionó los acercamientos de Evópoli con los partidos de centro. “Le ha expresado al presidente del partido (Rodrigo Galilea) mi preocupación, porque Chile Vamos, y especialmente Evópoli, ha insinuado que avanzaría en un pacto electoral con sectores como Demócratas y Amarillos”, indicó ayer.
Así, argumentó que las fuerzas de centro “han tenido un comportamiento más bien de partidos de gobierno, considerando su actuar en la acusación constitucional en contra del ministro Carlos Montes, y también ahora respecto del proyecto previsional que nosotros no compartimos”.
Al mismo tiempo, Sauerbaum emplazó a los dirigentes de Chile Vamos a que tomen una decisión:“Ojalá que eso sea a la brevedad y que no caigamos en hacer pactos electorales por conveniencia y sin convencimiento político respecto de nuestro actuar”.
Sin embargo, en la bancada de RN no todos coincidieron con el comunicado de Sauerbaum. De hecho, dicen algunos que no fue conversado al interior del bloque. Las mismas fuentes añaden que deben existir acercamientos con los partidos de centros, con el objetivo de tener candidaturas únicas y ampliar la coalición, pues aseguran que existen varias coincidencias con ellos.
En Evópoli, en tanto, el nudo principal es que no están dispuestos a pactar con republicanos, ya que argumentan que el partido fundado por José Antonio Kast representa a una derecha conservadora y que el proyecto político de Chile Vamos es distinto. Esa es una línea, agregan, que no están dispuestos a cruzar.
La presidenta del partido, Gloria Hutt, señala que “dentro de Chile Vamos todavía no hemos tenido una conversación sobre pactos ni de ningún tipo de alianzas, así que es un tema que todavía está abierto”.
El secretario general de la tienda, Juan Carlos González, agrega que “me parece un buen concepto el del presidente Piñera, (pero) para llevarlo a efecto se requiere de mucha coordinación y de muy buena voluntad, y a veces los datos de la realidad no son fáciles de resolver”.
Asimismo, en la directiva de Evópoli aseguran que no necesariamente el único objetivo es llegar a La Moneda, sino que la opción de plantearse como una oposición fuerte al gobierno de Gabriel Boric.
En republicanos tampoco están dispuestos a una alianza de ese tipo. El objetivo del partido es su crecimiento como proyecto político y, por lo mismo, están enfocados en las elecciones de este año.
En el centro, el partido Demócratas está dispuesto a una coalición con Chile Vamos, pero sin los republicanos (ver secundaria en página 21).
Esto sería otro de los nudos para la propuesta de Piñera, ya que desde Demócratas son enfáticos en su rechazo a la tienda fundada por Kast. Esta misma postura tienen en Amarillos.