Con resultados de focus group en mano, el coordinador de la campaña oficialista por el “En contra”, Ricardo Solari (PS), dejó en claro a los presidentes de partido de la alianza de gobierno que hay un factor al que, de forma urgente, tienen que hacer frente de aquí al plebiscito del 17 de diciembre: impedir que la oposición los acuse de querer impulsar un nuevo proceso constituyente.
La mañana del lunes, en una reunión que desarrollaron de forma temática, Solari les explicó a los timoneles que para la ciudadanía es una preocupación latente que, en caso de ganar el “En contra”, se dé partida a un nuevo proceso. Los dirigentes del oficialismo concluyeron que su exposición fue una señal para dejar claro ante la población que ellos, en ningún caso, están por abrir la puerta a un nuevo órgano constitucional.
El mensaje de Solari pegó fuerte en los partidos. Tanto, que solo horas después publicaron un comunicado -redactado por todos los timoneles, a través de WhatsApp- en que se comprometieron explícitamente a no iniciar una nueva aventura constituyente. “Desde ya, reiteramos que nuestros votos no estarán disponibles para tener hoy otro proceso constitucional”, se lee en el comunicado.
Desde entonces, ese ha sido un punto que los voceros del “En contra”, así como también los distintos dirigentes del oficialismo, se han encargado de promover. De hecho, la negativa al tercer proceso fue uno de los temas que el equipo de contenidos del comando -del que también participan Camila Miranda (Comunes) y el excomisionado Alexis Cortés (PC)- encargó abordar a través de una minuta enviada el miércoles de esta semana.
“El país no aguanta más incertidumbre. Es importante marcar que el proceso concluye con el ‘En contra’, porque los del ‘A favor’ están planteado que la única forma de cerrar este proceso es que se apruebe la Constitución. Y no es cierto. Si llegan a ganar, vamos a tener 10 años más de incertidumbre”, advirtió el presidente de los liberales, Juan Carlos Urzúa.
Tan consciente está el oficialismo de la importancia de cerrar el proceso de una vez por todas, que esta semana el Ejecutivo también se involucró, aunque terminó envuelto en una polémica. En su cuenta de X, la Segegob -ministerio encabezado por Camila Vallejo- compartió un afiche en que se recalcaba que, de ganar el “En contra”, no se abrirá otro ciclo constitucional.
Si bien el miércoles la cuenta de la cartera borró la publicación, los pantallazos quedaron. Y la oposición los usó para acusar que La Moneda tomó partida por el “En contra”, una estrategia que han intensificado durante la última semana. Incluso han tildado de “jefe de campaña” al Presidente Gabriel Boric.
Al interior del comando del “En contra” también tomaron acciones. Hasta esta semana, en el espacio de franja televisiva de esta opción solo se había realizado un guiño a la idea de que el proceso no continuará, a través del spot que trabajó la agencia 1984, de Felipe Mañalich, que se emite dos veces al día. En dicha pieza audiovisual una voz en off señala que “para cerrar este proceso, hay que votar en contra de este texto mal hecho y dar vuelta la página”.
En ese sentido, se espera que en los próximos episodios de la franja oficialista ese mensaje sea reforzado.
En paralelo, la alianza de gobierno también potenciará su trabajo territorial. Como la próxima semana será distrital en el Congreso, desde algunas de las tiendas oficialistas se les solicitó a los parlamentarios que se sumen a actividades de campaña que se desarrollarán en las distintas regiones del país.
“Estamos con toda la fuerza y convicción para sumarnos (...) a la campaña del ‘En contra’ en nuestras comunas. Incluso tendremos una reunión de coordinación por Zoom con la directiva del PS para revisar dónde podemos aportar”, adelantó el diputado Leonardo Soto, quien además es vicepresidente del PS.
El factor PC
“No debe haber ninguna señal que alimente las mentiras de la derecha”.
De esa forma, el exconvencional Marcos Barraza (PC) enfatizó esta semana en la Radio Nuevo Mundo -ligada a su colectividad- las razones que llevaron al documento firmado por los partidos de gobierno. “Es importante ser claro y nítido con la ciudadanía: en esta etapa, en lo que resta del gobierno, no hay espacio de ninguna manera para un tercer proceso constituyente”, agregó el exministro.
Los dirigentes del PC han sido enfáticos en este punto. Y es que, desde la propia alianza de gobierno, han recibido emplazamientos. “Creemos que (los comunistas) no otorgan esa certeza”, manifestó el presidente del PPD, el senador Jaime Quintana, hace unas semanas.
Lautaro Carmona, presidente del PC, rápidamente despejó las dudas: “Hemos dicho clara y categóricamente que no hay ninguna posibilidad de un tercer proceso en el actual gobierno”.
Sin embargo, al interior del mismo partido hay voces que se alejan de la declaración y que presionan a Carmona desde el ala izquierda, lo que quedó reflejado en el comité central en el que el pragmatismo de las autoridades PC se impuso a la solicitud de las bases de no dar por cerrado el tema constitucional.
Un representante del alero izquierdo del PC es el diputado Matías Ramírez, quien aseveró que “en octubre de 2019 fue la movilización de millones de personas lo que permitió abrir la discusión sobre un proceso constitucional. La misma ciudadanía en el plebiscito de octubre de 2020 pidió una nueva Constitución, y será la ciudadanía quien determine avanzar o no en un nuevo proceso”.
“Siempre he sido de la posición que es el pueblo soberano (...) el que debe deliberar el futuro constitucional de nuestro país. Debemos trabajar para ganar el ‘En contra’. Sin embargo, eso no supera la Constitución abusiva de Pinochet”, complementó la diputada Nathalie Castillo (PC).