“Sé que no soy un hombre joven, es obvio”, dijo ayer el Presidente de EE.UU., Joe Biden. Hablaba de su mal desempeño en el debate del jueves frente al expresidente Donald Trump. “Ya no hablo tan fluidamente como antes. No debato tan bien como antes. Pero sé decir la verdad”, señaló, exultante. Energizado y con una claridad con la que no contó el día anterior, confirmó su intención de seguir en la carrera por la Casa Blanca. Pero, ¿cuáles son los escenarios posibles tras las dudas sobre su continuidad?
Ni Biden ni Trump son los candidatos oficiales del Partido Demócrata y el Republicano, respectivamente. Sin embargo, ambos se impusieron en las primarias.
Dicho esto, una primera escena podría ser que los demócratas se manifiesten entre el 19 y el 22 de agosto, en la Convención Nacional Demócrata.
Este es el momento más sencillo para reemplazar a Biden, detalló The Washington Post. Si se baja de la carrera, los delegados tendrían que llegar sin comprometerse con el mandatario y apoyar a otro candidato, en lo que se conoce como “convención abierta”. Hace décadas que no ocurre, pero en 1960 se dio. Si continúa, la opción es que una figura intente convencer a los delegados de entregarle su apoyo, pero es altamente improbable, dijo Elaine Kamarck, del centro de investigación Brookings Institution.
Pasada la convención, es más difícil sacar de la papeleta a Biden, añadió la experta. El partido cuenta con reglas que facultan al líder de la tienda política a convocar al Comité Nacional para buscar a un nuevo candidato, como ocurrió en 1972 con el candidato a vicepresidente de George McGovern, reemplazado por motivos de salud.