Las cartas ya están echadas. Con la campaña concluida, a los partidos políticos -y a los candidatos independientes- no les queda más que esperar que los ciudadanos voten entre hoy y las 18.00 horas del domingo.
En los distintos partidos de la alianza que sustenta el gobierno del Presidente Gabriel Boric hay una sensación común: no están tan bien parados como quisieran. Reconocen sentirse así desde que recibieron la noticia de la denuncia por violación en contra del hoy exsubsecretario Manuel Monsalve. Y es que si bien la mayoría tenía aspiraciones moderadas, antes de conocerse ese episodio consideraron que el caso Hermosilla y los cuestionamientos a Marcela Cubillos jugarían a su favor. Hoy, sin embargo, están menos confiados.
Hasta este viernes, en el oficialismo miraban con lupa los números y advirtiendo competencias más que estrechas en comunas determinantes, como es el caso de Santiago -que enfrenta a Irací Hassler contra Mario Desbordes (RN)-, Ñuñoa -Emilia Ríos (Frente Amplio) contra Sebastián Sichel (Ind.-UDI)- o Valparaíso -Camila Nieto (Frente Amplio) contra Rafael González (Partido Republicano) y Carla Meyer (Transformar Chile)-.
Conscientes de que la competencia está ajustada en esa última comuna, el exjefe de gabinete del Presidente Boric, Matías Meza-Lopehandía, asumió como jefe de estrategia de la concejala porteña y se intensificó el despliegue de Macarena Ripamonti para mostrar una dupla fuerte en la región, que se ha convertido en un bastión del Frente Amplio.
Lo propio ha hecho el Partido Comunista con Hassler. Su campaña fue coordinada por el experto electoral de la colectividad Pablo Monje, y contó con la participación de los diputados Gonzalo Winter (Frente Amplio) Helia Molina (PPD), Alejandra Placencia (PC) y Lorena Fries (Frente Amplio).
Si en Santiago las cosas ya eran difíciles para el oficialismo, esta semana todo se complejizó para Hassler a raíz del grave incidente registrado en el Internado Barros Arana, donde 35 estudiantes terminaron con quemaduras tras la manipulación de explosivos al interior del establecimiento.
Lo estrecho que se prevén los resultados en algunas comunas ha hecho que entre las colectividades del pacto Contigo Chile Mejor, que agrupa al oficialismo y a la DC, estén particularmente molestos por los descuelgues que ha habido a lo largo de la carrera electoral.
Uno de los episodios más bullados lo protagonizó el diputado Diego Ibáñez (Frente Amplio) al respaldar a Camilo Riffo (independiente) en Concepción, donde la carta del pacto es Aldo Mardones (DC).
Pese a lo duro que ha sido el impacto del caso Monsalve, en el Partido Socialista -del que el exsubsecretario renunció este jueves- descartan que hayan tenido instancias de discusión profundas sobre el efecto electoral que podría tener en sus candidaturas. De todas formas, una postura común al interior de la colectividad es que el episodio provocará un aumento en los votos nulos y blancos, más que a favor de otros partidos. Una opinión compartida por otras colectividades e incluso por La Moneda.
En La Moneda sí constataron en la última semana que el caso Monsalve pegó en la intención de voto en la zona norte, donde el exsubsecretario estuvo desplegado el último mes, lo que estrechó la elección de gobernadores de Coquimbo entre Javier Vega (PC) y el candidato de Evópoli, Cristóbal Juliá.
El Frente Amplio apuesta a que Tomás Vodanovic sea primera mayoría nacional, a través de una candidatura en Maipú, una comuna clave, porque tiene un padrón de casi 400 mil personas. En la derecha reconocen que corren con desventaja. Sin embargo, esperan haber recortado la distancia de la mano de Enrique Bassaletti (republicano).
En la alianza hay quienes creen que si Vodanovic consigue ese logro podría convertirse en carta del FA para una primaria presidencial. Él, en todo caso, ha descartado en varias ocasiones que llegar a La Moneda esté en sus planes.
En esta elección municipal el FA se juega la posibilidad de consolidar su proyecto político. Por eso será importante ver si logran retener Viña del Mar, a través de la reelección de Macarena Ripamonti -aunque la distancia con Iván Poduje se habría estrechado, según sus cálculos-, y Valdivia con Carla Amtmann, la actual jefa comunal. En ese sentido, sin duda también es clave el futuro de Emilia Ríos en Ñuñoa, comuna asociada estrechamente al FA.
En el PPD, en tanto, son conscientes de que existe un riesgo alto de perder Huechuraba -comuna que han administrado desde 2012- en manos de Maximiliano Luksic, el candidato de la UDI. Sin embargo, enfatizan que hicieron los esfuerzos necesarios para mantenerla a través de la candidatura de Carolina Rojas, y que, de todas formas, hay otras comunas de la Región Metropolitana donde podrían estar presentes: Lo Prado, El Monte y Pirque.
Al interior de la alianza, además, ven complejo reelegir a Ricardo Díaz, quien compite en cupo PPD, como gobernador de Antofagasta. Son conscientes de que ahí la amenaza de la exministra Marcela Hernando (Partido Radical) es grande. De hecho, ella es respaldada por el senador PPD Jaime Araya y por el diputado Jaime Araya (ind.-PPD).
En el PS, por otra parte, confían en que lograrán la reelección de Karina Delfino en Quinta Normal. Ven, sin embargo, más compleja la tarea de mantener a Christopher White en el sillón municipal de San Bernardo. En caso de perder esa comuna, el golpe sería fuerte, pues en la colectividad encabezada por Paulina Vodanovic son conscientes de que han perdido fuerza en núcleos urbanos. De hecho, en las primarias de junio perdieron la opción de competir en Talca, La Granja, Valparaíso y Providencia.
En el caso de la DC, se mantienen optimistas con que mantendrán en sus manos La Granja, de la mano de la candidatura de Edita Alarcón. Lograrlo es sumamente importante para ellos, pues se trata de una comuna emblemática: la han administrado por más de tres décadas. Distinto es el caso de Concepción, donde son conscientes de que el resultado será estrecho. Por lo mismo, los dirigentes de la DC reforzaron los esfuerzos de campaña durante los últimos días permitidos.
Donde hay consenso en el oficialismo es en que Claudio Orrego obtendrá un buen resultado en la Región Metropolitana, donde busca la reelección como gobernador. De hecho, algunos dirigentes aseguran que incluso podría ganar en la primera vuelta. Y, de ser así, posicionarse como eventual candidato presidencial. El tema es mirado con atención en la derecha, desde donde levantaron dos candidatos -Francisco Orrego (RN) y Macarena Santelices (republicanos)-, sin embargo, ninguno ha logrado reducir la distancia.
En la coalición de centroderecha la principal apuesta es recuperar comunas emblemáticas de la RM como Santiago y Ñuñoa y crecer en gobernaciones y también en capitales regionales. Fuentes del bloque aseguran que esperan mantener Talca y Punta Arenas, también se proyecta sumar Puerto Montt y Antofagasta.
En paralelo, explican, las elecciones en Santiago, La Serena, Copiapó, Chillán, Temuco y Valdivia se mantienen abiertas.
En gobernaciones regionales, en tanto, existe expectativa por lo que pueda ocurrir en Coquimbo, donde Evópoli lleva a Cristóbal Juliá; y también en Valparaíso, con la exdiputada María José Hoffmann (UDI). En ambos casos se espera por lo menos llegar a segunda vuelta. En el caso de Valparaíso, el Partido Republicano también proyecta pasar al balotaje con Francesco Venezian.
En la Región Metropolitana, el foco también estará en Puente Alto, donde el escenario es incierto entre Karla Rubilar y Matías Toledo (independiente).
En Ñuñoa, si bien el resultado se mantiene incierto, la derecha confía en que Sichel se imponga. En Peñalolén, por su parte, en RN aseguran que la contienda entre Miguel Concha (FA) y Claudia Mora (RN) se ha ido estrechando, pero que la presencia de un candidato socialcristiano sigue siendo un factor a considerar. También hay apuestas a favor del sector en La Florida, con Daniel Reyes (ind.-UDI); Providencia, con Jaime Bellolio (UDI), y Huechuraba, con Luksic.
Las proyecciones de Chile Vamos apuntan también a que RN podría perfilarse como la primera fuerza del bloque por sobre la UDI y Evópoli.
Concejales
Un dato clave este domingo será el resultado de la elección de concejales, que marcará cuál será el partido más votado del país.
Frente a ese hecho existe coincidencia en todos los sectores de que la derecha corre con ventaja y en particular el Partido Republicano, que podría quedarse con la primera mayoría. Eso marcaría el mapa en la derecha. Y será un hito que la tienda que encabeza Arturo Squella saldría a relevar este fin de semana.
Ahora bien, fuentes de la coalición dicen que ven difícil que igualen los resultados alcanzados en las elecciones al Consejo Constitucional.
Más allá de eso, los republicanos también esperan resultados en tres comunas que fueron definidas como claves para el partido: Concepción, Valparaíso y San Bernardo.
