Réquiem por Tomás Bravo: los errores y las nuevas líneas investigativas

“Cold case”. Así llama la policía estadounidense a esas investigaciones que finalmente nunca son resueltas y, literalmente, “se enfrían”. Ese es el temor que hay en el entorno familiar de Tomás Bravo, el niño de tres años y siete meses que desapareció el 17 de febrero de este año en la Región del Biobío y que tras nueve días de intensa búsqueda fue hallado sin vida a dos kilómetros de su casa en Caripilún, Lebu, en la provincia de Arauco.

Este viernes a eso de las 10.38 horas el cuerpo del pequeño, que estuvo 56 días en el Servicio Médico Legal (SML) de Concepción, fue entregado a su madre, Estefanía Gutiérrez, en medio de alta expectación en las afueras del lugar. El extenso periodo que el cuerpo de Tomás permaneció en el recinto legista responde a una serie de peritajes encargados por la fiscal regional Marcela Cartagena, luego de que los exámenes preliminares no dieran luz de cómo se produjo su deceso.

El martes 20, el Ministerio Público socializó con los padres del niño los resultados de la autopsia tras casi un mes y medio de análisis: “La causa de muerte es hipotermia en contexto de deshidratación e inanición” y se descarta la intervención de terceros. Esto fue un balde de agua fría para la familia, que está convencida de que alguien secuestró a Tomás luego de que su tío abuelo, Jorge Escobar, según su versión, lo dejara solo durante 15 minutos mientras él arreaba unas vacas que se le habían escapado. Pero las conclusiones del auxiliar de justicia tampoco cayeron bien en el propio Ministerio Público y la fiscal Cartagena lanzó ese día: “Queda más de una (causa de muerte) que está dentro de las líneas de trabajo que nosotros estamos investigando. Las conclusiones del SML proponen una, que a mí me parece que la proponen de manera precipitada”.

El director del SML, Gabriel Zamora, ayer salió a hacerse cargo de estos cuestionamientos y apuntó a que el servicio “realizó distintos análisis forenses de tipo toxicológicos, bioquímicos, genéticos, odontológicos e histopatológicos. Producto de estos trabajos se logró completar más de 60 exámenes adicionales a partir de 230 muestras biológicas extraídas, que son evidencias (...), no quedando pendiente ningún examen ni antecedente de los que han solicitado en esta causa por parte del Ministerio Público”.

Al interior del Ministerio Público descartan sacar al equipo investigativo del caso y respaldan el actuar de la jefa del Ministerio Público del Biobío. Apuntan a errores supuestamente cometidos por las policìas que no cercaron el sitio del suceso y que permitieron a cientos de personas que participaron en la búsqueda de Tomás, los primeros días, impedir el hallazgo de pistas que los llevara hacia el niño que -según el SML- falleció a los cuatro días de su extravío.

Sobre la imputación a Jorge Escobar, quien está formalizado por homicidio calificado, pero se encuentra en libertad luego de que la Corte de Apelaciones de Concepción confirmara que no existen pruebas para vincularlo a la muerte de su sobrino nieto, la fiscalía aún baraja otras figuras penales para atribuirle. Una de ellas es el homicidio por omisión y la que cobra mayor consenso al interior del equipo investigador es el abandono de menor de edad con resultado de muerte. Para ello deberá probar que Escobar urdió un plan y dolosamente tuvo tiempo para ocultar a Tomás, y abandonarlo con la expresa decisión de provocar su fallecimiento. Tampoco se descarta la participación de un tercero que no sea este familiar.

En el Ministerio Público reconocen un error en pedir la detención del tío abuelo sin tener nada, pero, a su vez, no creen en la hipótesis planteada por el SML, ya que sostienen que “no es razonable suponer que no exista un responsable de su muerte, ya sea por acción u omisión”.

En ese nuevo escenario, el defensor regional del Biobío, Osvaldo Pizarro, quien defiende a Escobar, sostuvo que “la defensa está trabajando para recabar su propia prueba que permitirá fundamentar en el futuro y en el momento procesal adecuado la petición de sobreseimiento definitivo del señor Escobar respecto de los hechos por los cuales fue formalizado”. Agregó que “tras conocer el informe de autopsia y cotejar su integridad con los resultados de exámenes bioquímicos y de ADN, podemos afirmar que hay evidencia pericial suficiente y confiable que descarta el delito y la vinculación criminal que se le atribuyó a la persona del señor Escobar”.

Ayer, afuera del SML decenas de personas con globos blancos y con carteles que exigían “Justicia para Tomás” esperaban la salida del cortejo fúnebre que lo llevaría a Bajo Raqui, en la provincia de Arauco, donde será velado. Hoy se realizará su funeral, que se prevé será masivo. Las exequias son preocupación de la autoridad, pues en medio de la pandemia están prohibidas las aglomeraciones, pero se entiende el dolor que ha causado el caso en la comunidad y en todo el país