La actriz israelí Rona-Lee Shimon alcanzó fama mundial al interpretar a Nurit en la serie Fauda, pero desde los ataques de Hamas a territorio israelí, el 7 de octubre pasado, ha estado concentrada en brindar distintos tipos de ayuda. En conversación con La Tercera entrega detalles sobre la actual situación en su país.
¿Cómo se enteró del ataque de Hamas?
Me desperté por la mañana con un montón de llamadas de mi madre y muchos mensajes de texto en mi teléfono. Así que supe que algo estaba pasando, pero no sabía de qué se trataba, por lo que prendí la televisión. A medida que pasaba el tiempo, todo se hacía más oscuro, porque era algo que se estaba desarrollando mientras veía las noticias.
¿Cuál es el estado de ánimo de Israel en estos momentos?
La situación es terrible. Nos estamos moviendo en el espectro entre la desesperación total y la tristeza. Estamos horrorizados por lo que hemos visto, pero hay que tratar de mantener una manera de defendernos. Así que es en cualquier lugar de este amplio espectro estamos horrorizados. Estamos de duelo como nación.
Usted menciona mantener una manera de defenderse, ¿cómo ha sido la respuesta de los reservistas de las Fuerzas de Defensa de Israel?
Te diré algo muy alentador: el 100% de la población israelí puede ir a la reserva y querían ir a las reservas. Así que es un esfuerzo conjunto de todos, y cada uno está haciendo lo que puede en su frente. Nos tomamos de las manos en esto juntos. Todo el país está unido para, en primer lugar, traer de vuelta a nuestros rehenes y luego para darnos cuenta de hacia dónde vamos a ir a partir de aquí.
¿En qué actividades ha participado?
Tengo que decir que mucha gente, todo el mundo quiere ayudar. Todo el mundo está ayudando. Todo el mundo hace lo que puede. He sido voluntaria empaquetando comida para los soldados y llevándosela a sus bases. Ya sea se trate de llevar alimentos o equipo militar, porque hay tanta gente que se ofreció para las reservas que tenemos que cuidar de ellos. Vamos a ir a conocer a las familias de los sobrevivientes del segundo Holocausto de mi pueblo. Hay muchos niños que necesitan apoyo. Hay muchas personas que lo perdieron todo. Perdieron sus casas, no tienen dónde vivir. No tienen un lugar al que volver. Así que hay un gran esfuerzo para recaudar dinero para cuidar de estas personas, para cuidar de ellos mentalmente, para cuidar de ellos físicamente. Es muy importante alzar la voz ante los periodistas de todo el mundo. Creo que es muy importante en estos tiempos oscuros estar en comunicación con el mundo. Creo que una de las cosas más importantes que podemos hacer por nuestra nación es ser escuchados, no callar, para que la gente entienda de verdad lo que está pasando.
¿Cómo evalúa la respuesta de la comunidad internacional? ¿Cuál es su visión sobre quienes pudiesen ver a Hamas como “víctimas”?
Me alegró mucho saber que muchos de los líderes mundiales condenaron de una manera muy dura lo que se hizo a mi pueblo el 7 de octubre. Hablo de Gran Bretaña, Alemania y Estados Unidos. Muchas de las mismas voces se escucharon para condenar estas atrocidades que sucedieron. Pusieron fuera de la ley el apoyar a Hamas, que creo que es lo más cuerdo que se puede hacer: poner fuera de la ley el apoyar a una organización terrorista que hizo una cosa tan horrible que la mente humana ni siquiera puede comprender. Sobre la otra parte del mundo que los está llamando víctimas, quiero ser muy clara: los monstruos malvados que pueden hacer lo que estos animales han hecho nunca podrían llamarse víctimas, jamás.
Usted es conocida por su papel de Nurit en la serie Fauda e incluso en la última temporada la trama los lleva a Gaza. ¿Cómo ha sido enfrentar la realidad que quizás muchas veces actuaron en la serie?
Tengo que decir que despertar el sábado por la mañana, hace dos semanas, a esta pesadilla, a esta interminable pesadilla, ha sido devastador. No creo que nadie en su sano juicio podría haber escrito algo tan horrible. Al final del día Fauda es solo un show. Ahora que conversamos, yo estoy en un espacio seguro donde puedo responderte. Pero hay gente que está siendo torturada por Hamas en Gaza en estos momentos en los que estamos hablando. Hay gente que ha perdido no sólo su hogar, no sólo a sus familias y a sus seres queridos. Nacemos y caminamos por esta tierra sabiendo que tenemos un lugar en el mundo. Y eso es algo que se rompe dentro del espíritu israelí en este momento. Se pierde la confianza en la humanidad. Creo que cuando te das cuenta de que los humanos pueden haber hecho esto, realmente pierdes algo dentro de ti, cuando ves lo que han hecho. No creo que hayamos sido testigos de tal maldad en la Tierra en la forma que fuimos testigos el 7 de octubre, es un punto de inflexión. Ha cambiado la forma de la guerra. La guerra no es infiltrarse en las primeras horas de la mañana en los hogares de las personas inocentes, sólo civiles inocentes y hacer todo lo que han hecho. Eso no es la guerra. Todo lo que han hecho hasta ahora, ya sabes, con los misiles, hemos estado lidiando con ellos durante 70 años. Lo sabemos. Pero esto fue completamente diferente. Últimamente mucha gente me pregunta sobre las proporciones, que tenemos que ser proporcionados con nuestra respuesta. Pero la palabra proporción debería estar fuera del juego después del 7 de octubre, porque responder “proporcionalmente” sería infiltrarnos ahí y hacer lo que nos hicieron a nosotros. Pero te puedo asegurar que no hay ni un soldado israelí o una persona israelí que haga lo que nos hicieron ellos, que entraron a las casas y mataron a civiles de manera brutal.
Hamas mantiene rehenes, ¿cree que se están haciendo todos los esfuerzos para traerlos de vuelta?
Creo que debería ser un esfuerzo mundial traer de vuelta a los rehenes. El mundo debería saber que retienen a personas de otros 36 países. También han asesinado a personas de otros países. Y no van a parar. Y lo primero en lo que el mundo debería unirse es en el asunto de los rehenes. El mundo debería dejar de hacer todo lo que está haciendo para ejercer toda la presión posible sobre el mundo árabe, sobre Hamas, sobre los palestinos, para que devuelvan a la gente, a los niños, a las mujeres, a todos los que se llevaron en mitad de la noche.