Tras estallar la guerra en Jartum, el doctor Abeer Abdullah, quien aparece en el registro de video entregando testimonio de lo ocurrido, se tuvo que literalmente multiplicar entre las habitaciones del orfanato más grande de Sudán, intentando socorrer a cientos de bebés y niños mientras los combates habían alejado a casi todo el personal de la Institución.
“Los gritos de los niños resonaron en el edificio mientras los fuertes disparos sacudían los alrededores” Contó el médico visiblemente impactado por los hechos”.
En los testimonios que aparecen en el video, se da cuenta de las muertes de los bebés que estaban alojados en los pisos superiores del orfanato estatal, conocido como Mygoma.
“Sin suficiente personal para cuidarlos, sucumbieron a la desnutrición severa y la deshidratación, los recién nacidos ya frágiles, murieron después de desarrollar fiebre alta. Aseguró el médico.
Según reporta el medio Infobae, un alto funcionario del orfanato confirmó las muertes y un cirujano que se ofreció como voluntario en las instalaciones durante la guerra dijo que hubo al menos varias docenas de muertes de huérfanos. Ambos dijeron que las muertes eran en su mayoría de recién nacidos y otros menores de un año. Los tres mencionaron la desnutrición, la deshidratación y las infecciones como las principales causas.
La agencia Reuters revisó siete certificados de defunción fechados el sábado o el domingo que fueron compartidos por Heba Abdullah, una huérfana convertida en cuidadora. Todos mencionaron la insuficiencia circulatoria como la causa de la muerte, y todos menos uno también mencionaron la fiebre, la desnutrición o la sepsis como causas contribuyentes.
Los bebés muertos de Mygoma se encuentran entre las víctimas invisibles de la guerra en Sudán, el tercer país más grande de África por área. La lucha ha matado a más de 700 personas, herido a miles y desplazado al menos a 1,3 millones de personas dentro de Sudán o países vecinos, según Naciones Unidas.