Tras el paso del huracán Florence, que ya ha provocado 31 muertes en Carolina del Norte, ocho en Carolina del Sur y una en Virginia, los servicios de emergencia desplegaron operaciones de búsqueda y rescate, distribuyeron suministros y, ahora, los bomberos sacan peces muertos en descomposición de las carreteras.
El Departamento de Bomberos de Penderlea compartió en sus redes sociales el registro de la limpieza llevada a cabo en la autopista Interestatal I-40, donde debieron "barrer" con su chorro a presión los ejemplares que causaban un olor insoportable.
Además, en un comunicado del departamento dijeron que "el olor es lo que es; esto fue hecho por la seguridad de los automovilistas ya que algunos de los peces eran en realidad bastante grandes y podrían ser peligrosos si son golpeados".
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A una semana de la llegada del huracán grado 1, los habitantes y autoridades de Estados Unidos se preparan para las grandes inundaciones que vendrán. Asimismo, más de 33 mil hogares y edificios están sin electricidad.
