El Museo Mammoth de la Universidad Federal Noreste de Yakutsk estuvo a cargo, junto a un equipo de científicos japoneses y rusos, de la investigación donde gracias a los residentes locales, cuentan los expertos, habrían dado con la pista de la cría de caballo.
Según el jefe del laboratorio del museo, <strong>Semyon Grigoryev</strong>: "Este es el primer descubrimiento en el mundo de un caballo prehistórico de una edad tan joven y con un nivel de preservación tan sorprendente"
Los primeros estudios arrojaron que la especie tenía entre 2 y 3 años cuando murió. Al ver las imágenes llama la atención que su pelaje, cola y pesuñas se mantengan de forma casi intacta; sus órganos internos también se preservaron. Todo gracias al permafrost, la capa del suelo que está por debajo de la temperatura de congelación (-2º).