El partido entre Flamengo y Santa Fe por la Copa Libertadores en Bogotá tuvo un escandaloso término, luego que el árbitro pitara el final del encuentro justo antes que el conjunto brasileño hiciera un gol.
Cuando iban en el minuto 50, el atacante de Flamengo, Geuvanio, le quitó el baló a Juan Daniel Roa en la entrada del área del cuadro colombiano. Tras el robo, el delantero realizó un gol que fue desestimado por el juez, ya que finalizó el encuentro segundos antes.
"El árbitro acabó cuando teníamos la pelota. Tenía la oportunidad de pitar cuando la tenía el defensa de Santa Fe. El arbitraje no nos favoreció. No conseguimos hacer lo que planteamos, fue un arbitraje polémico", dijo el DT del Flamengo, Mauricio Barbieri.