El motor fue desarrollado por NPO Energomash y debería equipar en el futuro al cohete Soyuz-5, el cual tiene previstos sus primeros vuelos para 2022. Será utilizado también como una unidad lateral para el vehículo de elevación superpesado Yenisei, cuyo lanzamiento está estimado para 2028.
El primer propulsor RD-171MV será entregado a Roscosmos en 2021. Según Dmitry Rogozin, máximo dirigente de la agencia espacial, no existe en el mundo un propulsor de cohete que se iguale en términos de potencia.