Con vientos que superaron los 230 km/hr, el supertifón llegó al norte de Vietnam, donde 14 personas han muerto y cerca de 200 han resultado heridas, según un balance preliminar.

Las autoridades estiman que más de 3.000 hogares han sufrido daños y más de 120 mil hectáreas de plantaciones de arroz han quedado inundadas, mientras que diversas zonas del país se han quedado sin suministro eléctrico.

De momento, el tifón ha perdido fuerza, pero el Gobierno vietnamita advierte que aún pueden producirse inundaciones y deslizamientos de tierra, producto de la gran cantidad de agua caída en las últimas horas.