Los datos recopilados en este video revelan cómo las células nerviosas llamadas "propioceptivas" trabajan juntas para ayudar al cuerpo a sentir dónde está en el espacio. Para lograr esta investigación, el equipo utilizó a SCAPE, un microscopio de vanguardia desarrollado en Columbia que muestra las neuronas a velocidades realmente sorprendentes.

El estudio, publicado en Current Biology, grafica claramente la gran capacidad de SCAPE para revelar el funcionamiento interno del sistema nervioso con detalles sin precedentes. Al crear imágenes en 3D con la acción en vivo de las células nerviosas en las larvas a medida que los animales se mueven, SCAPE les permitió a los investigadores ver exactamente cómo las células enviaban información hacia el cerebro.

"Sabemos que el cerebro recibe señales sensoriales a través de los impulsos eléctricos que pasan <span class="tlid-translation translation"><span class="" title="">a lo largo de las neuronas, pero no entendemos por qué algunos tipos de neuronas están ubicadas en posiciones específicas, o cómo patrones de señalización particulares representan movimientos diferentes", dijo <strong>Wesley Grueber</strong>, PhD.</span> <span class="" title="">investigador principal del Instituto Mortimer B. Zuckerman Mind Brain Behavior de Columbia. </span></span>

Los científicos habían planteado durante mucho tiempo la hipótesis de que la propiocepción venía con redundancia porque apagar una de estas neuronas solo hacía que la larva se arrastrara más lento. Sin embargo, el estudio encontró que cada neurona tiene su propio papel ligeramente diferente y está posicionada de manera precisa para detectar aspectos específicos del movimiento de los animales.