El ingeniero en electrónica de Florianópolis, Francisco Boni, capturó a miles de hormigas legionarias utilizando sus propios cuerpos para realizar la construcción de un puente colgante. El objetivo de las ejemplares era llegar a un panal de avispas que colgaba del techo de una casa y poder obtener su miel.
Muchos se han preguntado porqué las hormigas hicieron un puente en vez de caminar por el techo y llegar a su objetivo. Sin embargo, la explicación, de la compleja estructura, es que para estos insectos es mucho más cómodo seguir el camino sobre un puente que va hacia abajo y luego hacia arriba en vez de caminar boca abajo.