Las maniobras fueron supervisadas por la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, y por el jefe de la Fuerza Armada, Eduardo Scarzello.
La embarcación china estaba pescando ilegalmente a 358 kilómetros y sin geoloclización, según la prefectura a bordo del barco argentino, en el golfo de San Jorge. Mientras los guardacostas patrullaban la zona se encontraron con este buque a unos 1.000 metros del límite exterior de la zona de exclusión; su posición no coincidía con la que debía estar siguiendo y no acataba las órdenes del Mantilla.
En el registro se puede escuchar a los guardacostas avisando al pesquero chino de las represalias si no seguían las órdenes. Al no responder, los argentinos abrieron fuego.