En una visita al zoológico de Chengdu, China, una niña de 8 años cayó al lugar en que habitan los pandas. La pequeña cayó al foso de dos metros de profundidad después de sentarse en la valla que lo rodea.
Un agente de seguridad, identificado como Liu Guihua, trató de alcanzar a la niña con una caña de bambú, pero tras varios intentos fallidos decidió sacarla con sus manos mientras algunas personas lo agarraban de la cintura.
La niña alcanzó a salir ilesa del lugar, justo cuando los osos se amontonaban en el borde para acercarse a ella o solo ver qué sucedía.