Una enorme avalancha sepultó a un niño de 12 años durante 40 minutos en los Alpes franceses. El menor se encontraba esquiando fuera de la pista con un grupo de siete personas, sin embargo, él fue el único afectado por el siniestro.

Calificado como un "milagro", por los mismos rescatistas, el pequeño fue encontrado con vida por un perro rastreador. Según informó la policía de la ciudad Bourg Saint-Maurice, el niño habría sido arrastrado al menos 100 metros por la fuerza del fenómeno y su chaqueta no contaba con el detector especial en caso de avalancha.

El capitán, Patrice Ribes, explicó que, uno de los motivos por los cuales el niño sobrevivió, es porque la nieve no bloqueó sus vías respiratorias.