El experto en pingüinos, Dyan de Napoli, dijo: "En la naturaleza el comportamiento natural es que hasta cierta edad uno de los padres siempre estará con la cría". Esto significa que el recién nacido no debería haber estado solo.
Al darse cuenta que su polluelo no estaba, la madre se desesperó e intentó recuperarla "peleando" con la pareja que tampoco quería entregarla. El personal del zoológico debió interceder para devolver al pequeño pingüino, pero luego le regalaron su propio huevo a los dos machos.
"¡Disfruta el caso del pingüino secuestrado!
Después de un día, nuestra asistente de animales Sandie tuvo que intervenir para devolver al niño a sus padres. Se desencadenó una pelea entre los dos pares de pingüinos, pero como un reemplazo, Sandie le dio a los dos machos un huevo de pingüino que pueden caber en su lugar.
Ahora hay paz e idilio nuevamente en la planta de pingüinos".