Columna de Thomas Keller: los aprendizajes de la pandemia
Los pasos ante la crisis, el trabajo conjunto de toda la compañía, los afectos que se extrañan, las lágrimas con algunos compañeros. Este es el Relato Personal del gerente general de Colbún, Thomas Keller.
¿Cómo nos enfrentamos a una situación de tanta incertidumbre y de la cual sabemos tan poco? A pesar de que muchos de nosotros tenemos 20 ó 30 años de experiencia manejando, muchas veces, situaciones complejas, no nos había tocado algo como esto. Si tuviera que resumir la enseñanza en una palabra, diría que es humildad. El estar dispuesto a aprender de otras experiencias, de los colegas, de las personas que trabajan en la empresa. Así fuimos construyendo en Colbún los protocolos, las mejores prácticas para -en la medida de lo posible- controlar los contagios dentro de la compañía, tanto en la faena misma y en nuestras centrales, como en nuestras oficinas y también en las casas. El país no estaba preparado y, ciertamente, tampoco el mundo de las empresas ni nosotros como compañía. Ni como personas, ni como ejecutivos. Nos encontramos frente a una situación para la cual no teníamos recetas ni o planes de contingencia ,que son las herramientas a las cuales estamos acostumbrados. Normalmente tenemos un mapa de riesgos en las compañías, y asociado a cada riesgo, planes de gestión y mitigación. Pero esta situación es de una magnitud y novedad tales que no teníamos el check list, por así decirlo, con las respuestas apropiadas ni de las actividades que había que implementar. Por eso tuvimos que enfrentar la situación con una disposición a estar muy abiertos a aprender, escuchar, ponernos en el lugar de las otras personas y, en definitiva, ser súper flexibles para que, a través del tiempo, ir adoptando las medidas que nos parecían más adecuadas.
"El país no estaba preparado y, ciertamente, tampoco el mundo de las empresas ni nosotros como compañía. Ni como personas, ni como ejecutivos.
Como todas las situaciones complejas en una empresa, si tuviéramos que destacar algún elemento importante que nos ha ayudado a manejar esto, es el trabajo en equipo. Como pocas veces, hemos dependido del compromiso de toda una organización, del cariño hacia la empresa de todo el equipo y, en definitiva, cómo el trabajo mancomunado nos ha permitido, dentro de lo posible, manejar esto en forma adecuada. ¿Por qué digo de forma adecuada? Porque nosotros hemos logrado mantener la continuidad operacional de un servicio tan fundamental como es el suministro de energía eléctrica, y al mismo tiempo, tener indicadores de salud ocupacional relativamente buenos. De hecho, hasta el día de hoy hemos tenido un número acotado de contagios, pero ninguno se ha producido en nuestros lugares de trabajo. El trabajo en equipo ha sido entonces muy relevante. La primera instancia de trabajo colectivo fue el comité de emergencia que inicialmente se juntaba todos los días para planificar las actividades que apuntan a que -dentro de las limitaciones que nos impone esta crisis- el trabajo se haga de una manera más segura, amena y constructiva posible.
"Hemos logrado mantener la continuidad operacional de un servicio tan fundamental como es el suministro de energía eléctrica, y al mismo tiempo, tener indicadores de salud ocupacional relativamente buenos
En lo personal, como para todos los chilenos creo yo, el formato de teletrabajo ha sido un cambio de rutina importante, y contrariamente a lo que uno podría pensar, es bastante más agotador que el formato presencial, porque se echa de menos el contacto presencial con la gente, la forma de comunicarse cara a cara. En mi caso, llevo trabajando en esta modalidad desde el 16 de marzo, así que vamos a cumplir casi cuatro meses encerrado. Ha sido un proceso duro en lo emocional, porque se echa de menos el contacto presencial con la gente y, en mi caso, con mis hijas. El 98% o 99% de la gente que trabaja en las oficinas corporativas en Colbún están en teletrabajo. En centrales, el grupo de personas cuyas tareas se pueden cumplir desde el hogar y están haciendo teletrabajo representan cerca de un 35% de la dotación de las centrales. Y en esos casos también tenemos el testimonio de la gente que quisiera volver a trabajar, a tener ese contacto con sus colegas o amigos con los que comparten en faenas o en la oficina.
"El formato de teletrabajo ha sido un cambio de rutina importante, y contrariamente a lo que uno podría pensar, es bastante más agotador que el formato presencial
La gente que está teletrabajando soporta una carga adicional, por tener que hacerse cargo de la educación de sus hijos y en algunos casos, de adultos mayores. Pensemos en papás o mamás que tienen niños en edad escolar, para quienes este período ha sido una carga adicional importante. Ellos quieren volver a la oficina en condiciones seguras, cuando esas condiciones estén dadas, y claramente lo asocian a una nueva normalidad. Hemos tratado de suplir eso con muchas herramientas interactivas , a través de las videoconferencias , que no es lo mismo que el contacto presencial , pero ayuda. También con muchas iniciativas donde ejecutivos de la compañía comparten con sus equipos , a través de entrevistas, seminarios y videos. También tenemos iniciativas como las pausas recreativas por ejemplo, donde dos o tres veces a la semana paramos para hacer ejercicios , de tal manera de distender la rutina diaria. Son iniciativas para aliviar un poco el estrés adicional, y representan una suerte de reconocimiento al compromiso y la contribución que nuestra gente ha demostrado todos estos meses. Pero creo que, al final, la gran mayoría de mis colegas, y quizás es un fenómeno nacional, echamos de menos estar con nuestros compañeros de trabajo.
"Creo que, al final, la gran mayoría de mis colegas, y quizás es un fenómeno nacional, echamos de menos estar con nuestros compañeros de trabajo
En ese contexto, un hito interno interesante en Colbún fue lo que ocurrió en mayo, cuando cumplimos nuestro cumpleaños 34 como compañía. Tradicionalmente, hacíamos una celebración presencial, que partía a la hora de almuerzo y se extendía hasta las 5 ó 6 de la tarde. Normalmente lo hacíamos en un lugar como Espacio Riesco, donde venía gente de todas las centrales y armábamos un espectáculo. Bajo las actuales circunstancias, obviamente no se podía realizar, pero decidimos hacerlo en formato virtual, con las limitaciones que eso nos impone. Sin embargo, logramos hacer algo que resultó muy cercano, convirtiéndose en un gran punto de encuentro y donde creo que la gente lo pasó bien. Tuvimos virtualmente a toda la gente conectada, a los casi mil trabajadores y colegas conectados en ese momento. Tuvimos a la Kena Larraín (Javiera Contador) animando junto a Eduardo Fuentes, con número musicales y también testimonios de nuestra gente, vivencias bien especiales que quisimos dar a conocer en este formato. Fue una oportunidad de sentirse, a pesar de la virtualidad, juntos. Ese fue su valor: retomar ese contacto. Bajo las condiciones actuales, uno de los atributos más importantes que pienso hay que promover es la empatía. Mis hijas ya están grandes y no viven conmigo. Entonces, no es tan automático el ponerse en el lugar de una persona que está con las responsabilidades del trabajo y, al mismo tiempo, a cargo del cuidado de los niños, de su educación. Lo veo en el caso de una de mis hijas, que justamente está en esa situación. Lo menos que podemos hacer aquellos que estamos en posición de liderazgo es tratar de ponernos en el lugar de ellos y, dentro de nuestras posibilidades, ayudarles a alivianar esa tarea.
"Bajo las condiciones actuales, uno de los atributos más importantes que pienso hay que promover es la empatía.
En el ámbito más personal, me acompaño mucho con mi piano. Cuando necesito distraerme y salir un poco de la rutina del trabajo, como estoy casi todo el día en modalidad teletrabajo, cada cierto rato me voy al piano y me distraigo recordando algunas canciones que se me vienen a la mente, especialmente en estos tiempos. Lo uso como acompañamiento para cantar, y tengo un repertorio muy amplio, desde Peter Gabriel hasta Miguel Bosé. Ha habido momentos muy emotivos con mis hijas. Cada vez que tenemos una junta en modalidad virtual ha sido emocionante, como ocurrió por ejemplo en el Día del Padre. Tengo por otra parte una hermana que es médico y está hoy día en el frente de batalla de Valparaíso, por lo que también me ha tocado conocer lo que está ocurriendo allí.
"Cada cierto rato me voy al piano y me distraigo recordando canciones que se me vienen a la mente. Lo uso como acompañamiento para cantar, y tengo un repertorio muy amplio, desde Peter Gabriel hasta Miguel Bosé.
Y en el caso de Colbún también con los colegas ha habido momentos especiales, donde incluso hemos tenido uno que otro lagrimón que compartir, y donde nos hemos reconocido unos con otros, lo que no tiene nada de malo incluso en el mundo empresarial: ser emocional, compartir las penas, escuchar al prójimo y ser escuchado. En definitiva, en nuestra compañía contamos con un equipo de primer nivel, tremendamente comprometido, y que me ha ayudado como gerente general de esta compañía a llevar este proceso de forma relativamente ordenada: estamos tranquilos en el sentido que hemos hecho todo lo posible por llevar esta condición de trabajo lo más llevadera posible. Como dije, especialmente en los momentos más complejos de la compañía, los liderazgos son importantes. No los individuales, sino los equipos que trabajan en conjunto y, a partir de eso, se pueden lograr grandes cosas.
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