Centinela I: la embarcación escuela de la U. San Sebastián que surcará el sur de Chile

Abarcar el territorio austral de una manera distinta, respondiendo a una realidad geográfica compleja del país desde la academia. Ese es el objetivo central del Centinela I, la nueva embarcación escuela de 57 pies de longitud (17 metros aproximadamente) adquirida por la Universidad San Sebastián (USS), que se convertirá en una nueva “sala de clases” para estudiantes de la casa de estudios con presencia a nivel nacional. La nave ya está operativa, realizando su primer viaje desde Algarrobo hasta las sedes de Concepción, Puerto Montt y, próximamente, Valdivia.

Inspirados en el Buque Escuela Esmeralda, la apuesta de la USS con la adquisición del Centinela I responde a la experiencia de prestigiosas universidades, como el MIT de Estados Unidos, que arriendan buques para investigación en zonas remotas. El proyecto de la USS, en tanto, nació en 2017 y se materializó con el reciente arribo de la nave desde el prestigioso astillero francés Beneteau, que desde 1884 es una de las marcas más respetadas en la construcción de este tipo de naves.

La embarcación tendrá como prioridad a los estudiantes de Ingeniería en Gestión en Expediciones y Ecoturismo, que con 14 años como parte de la oferta académica USS, cuentan con una especialidad en navegación, donde los jóvenes aprenden a surcar los mares en cuarto año.

Hugo Lavados, rector de la USS, considera que practicar la docencia así es mucho más eficaz en un entorno significativo. “El aprendizaje es mayor y de mejor calidad cuando se desarrolla en conjunto con la práctica. Centinela I tendrá gran impacto en nuestros estudiantes, los que aprenderán arriba de esta embarcación en el mar”, relata.

En tanto, Francisco Sánchez, director del proyecto, con amplia trayectoria en el rubro turístico, ve en Centinela I la posibilidad de responder a la necesidad práctica de la enseñanza, así como a expediciones deportivas, investigaciones científicas en Campos de Hielo y otras zonas de difícil acceso sin transporte marino. Además, la embarcación reflotará proyectos de la USS en Puerto Williams y el cabezal norte de la Antártica.

Modificado especialmente para la institución, Sánchez relata que arriba de la nave se pueden embarcar hasta 15 tripulantes pernoctando en su interior, contando a la guardia de turno. “Queremos ejercer una soberanía académica distinta en zonas remotas. Ser protagonistas y tener más naves para conocer un área enorme que aún queda mucho por explorar”, complementa, pensando en ser un aporte a la Armada de Chile, prestando servicios tanto en eventos complejos como en intervenciones.

Michelle Martínez, estudiante de Ingeniería en Gestión en Expediciones y Ecoturismo en la sede USS De la Patagonia, forma parte de la primera tripulación de Centinela I, y contó en la reciente recalada en Talcahuano que “ha sido una experiencia increíble; en la tripulación son todos muy apañadores. Participar en este primer trayecto desde Algarrobo a Talcahuano ha sido desafiante. Nunca había salido a mar abierto, sólo había estado en canales, fiordos y archipiélagos. Es una experiencia única. La incorporación del Centinela I a la Universidad es muy positiva, ya que no sólo proporciona oportunidades de aprendizaje, sino que también se relaciona con expediciones científicas y ayuda a lugares remotos”.

De hecho, se espera que la nave participe en operativos médicos, clínicas jurídicas, asesoramiento a emprendedores, apoyo psicológico y psiquiátrico, entre otras acciones que empoderarán a las sedes regionales de la USS. “Centinela I tendrá el sello sebastiano, siendo un aliado en la formación académica, un instrumento para el desarrollo de la ciencia y una herramienta para contribuir al bienestar de la sociedad”, dice el rector Lavados.

En suma, el Centinela I abarcará tareas que ya cumplen navíos como el Cirujano Videla de la Armada, que efectúa operativos médicos en zonas remotas; el yate Vinson of Antarctica, dedicado a investigación e instrucción académica en mares australes; o el buque Cabo de Hornos, dedicado a temas científicos.

El lugar de operaciones del Centinela I será el cabezal norte de la Patagonia, específicamente el golfo de Ancud. La embarcación cuenta con un capitán instructor durante los 365 días del año, autoridad máxima a bordo que contará con tripulantes rotativos de la carrera de Ingeniería en Gestión en Expediciones y Ecoturismo, que harán mantenimiento y recibirán instrucción diaria a bordo. Una navegación fija con motivos que permite a los estudiantes acumular horas zarpadas, recaladas y millas náuticas navegadas, tres indicadores relevantes para ellos en el mercado turístico.