El éxito de una empresa o compañía no solo se mide por los beneficios económicos que genera, sino también por la calidad del ambiente laboral que ofrece a sus colaboradores y por las acciones que impacten positivamente en otros ámbitos, como puede ser en el medioambiente, en sus proveedores o en la comunidad.

Por lo mismo, cada vez son más las organizaciones que ponen especial atención en estos aspectos y toman medidas para mejorar la calidad de vida de sus colaboradores. “Tenemos la convicción de que, si somos capaces de darles bienestar, vamos a poder generar mayor valor para quienes nos eligen día a día”, asegura Agustín Alfonso, gerente general corporativo de Rosen.

De hecho, la empresa ha sido certificada constantemente como uno de los mejores lugares para trabajar en Chile por Great Place to Work, entidad que volvió a incluirla en su más reciente ranking publicado en marzo, en el segmento de más de mil colaboradores. Esta organización reconoce a las empresas que generan y sostienen un buen clima laboral, a través de factores como la confianza de los trabajadores, el desarrollo profesional que se ofrece, la innovación que se promueve, entre otros. Esto, a través de un cuestionario que mide la percepción de quienes integran el personal.

“Nuestras relaciones se basan en respeto, confianza y mutua colaboración, entendiendo que el propósito principal es mejorar el bienestar del equipo. Es así como hemos logrado construir un puente efectivo y cercano entre las Organizaciones del Personal y la dirección corporativa, logrando que las diferentes temáticas se desarrollen conjuntamente bajo un esquema de permanente comunicación y coordinación”, resume Agustín Alfonso.

Para Andrea Ferrandiz, Senior Human Resources Manager de Stryker –empresa de tecnología médica que lidera el ranking de Great Place to Work 2022 en el segmento de compañías con hasta 250 colaboradores–, “contar con la certificación del Great Place to Work nos reafirma que vamos por un buen camino, pero a su vez nos exige seguir adaptándonos y creando más y mejores espacios de participación y escucha activa de todos nuestros colaboradores y colaboradoras”.

Ferrandiz agrega que “los nuevos tiempos nos demandan ir agudizando nuestra forma de conectar con los equipos, de brindar mejores herramientas de capacitación y fomentar liderazgos cercanos y participativos. Sabemos que este es el camino para captar a los mejores talentos y así brindarles un espacio en el que la diversidad, la inclusión y la equidad sean el ADN presente en todos lo que hacemos”.

Un ambiente laboral positivo puede impactar notablemente en las organizaciones: puede mejorar la motivación de los colaboradores, reducir el estrés y la carga negativa, promover la creatividad, fomentar la colaboración y atraer y retener talentos.

“Nuestros imperativos estratégicos se construyen en base a una cultura de diversidad e inclusión. Cada persona es valorada en su individualidad e invitada a desarrollar sus fortalezas y a potenciarse con las fortalezas de otros. Esto promueve equipos de alto rendimiento, disruptivos y capaces de cocrear soluciones en un ambiente de respeto y colaboración”, enfatiza Andrea Ferrandiz, Senior Human Resources Manager de Stryker.

Además, indica que “nos preocupamos de atraer a los mejores talentos y que encuentren aquí un espacio de crecimiento donde puedan desarrollar su mejor versión. Aún, considero, nos falta mucho camino por andar, muchas cosas que ir perfeccionando y adaptando acorde a los cambios acelerados que nos propone el entorno, pero considero que vamos por buen camino”.

Rosen, por su parte, en el marco de su estrategia de sustentabilidad, llamada “Sueños Conscientes”, ha implementado otras acciones para impactar en su cultura interna y en sus colaboradores. Por ejemplo, una de ellas ha sido la adhesión al Desafío 10X, de la Fundación 10X, que busca acortar las brechas salariales entre los mayores y menores ingresos a un máximo de 10 puntos.

“Nos adherimos voluntariamente a estos compromisos, para tener una brecha salarial inferior a 10 veces y sueldos brutos por sobre las 22 UF”, dice Agustín Alfonso. Además, agrega que el compromiso es que todos los sueldos sean superiores a esa cifra.

“Como compañía para nosotros las personas son lo más importante. Trabajamos para mejorar la calidad de vida de nuestros clientes y darles soluciones de descanso. Pero eso parte por todos nuestros colaboradores, por eso hemos implementado diferentes medidas para hacer que el ambiente laboral sea grato, que su calidad de vida también mejore por ser parte de la empresa y que vean que su compromiso con nosotros es recíproco”, resume Agustín Alfonso.

De hecho, la estrategia de Sueños Conscientes tiene una de las aristas –llamada Soñemos en Comunidad– enfocada en mejorar la calidad de vida de los colaboradores, proveedores, comunidades y clientes. Por eso, han fortalecido otros aspectos, como programas de becas de estudios para que los colaboradores y sus hijos puedan desarrollarse.

“Es algo que impacta en el equipo humano, porque si alguien no tiene los recursos económicos para que sus hijos e hijas puedan desarrollarse, genera un impacto negativo en su estabilidad emocional. Entonces cuando lo detectamos, generamos este programa y el año pasado becamos a más de 300 niñas, niños y jóvenes”, detalla Agustín Alfonso, gerente general de Rosen.

Otro de los aspectos relevantes que destacan los consultados es la flexibilidad laboral, en especial lo que han conseguido con la implementación de las jornadas de 40 horas. La nueva Ley de 40 horas laborales, que rige a los trabajadores bajo el Código del Trabajo, busca reducir gradualmente la jornada en un plazo de cinco años.

Sin embargo, existen organizaciones que ya han puesto en marcha la reducción de la jornada laboral y una de ellas ha sido Rosen. Desde octubre de 2022, y enmarcado en su estrategia de sustentabilidad, la empresa implementó la medida para contribuir a la calidad de vida de sus trabajadores y familias.

“Ha sido un éxito, la gente está feliz porque ha visto que es posible adaptar y flexibilizar el horario, pese a las dificultades operacionales y diferentes realidades de cada área. Ha existido muy buena disposición y voluntad para enfrentar este desafío, el que hasta ahora nos ha permitido mejorar el bienestar interno y la productividad”, agrega.

Verónica Mujica, fundadora de la empresa de aromaterapia y cosmética Katmandú, relata que cuando partió utilizaban jornadas de medio tiempo hasta que la empresa fue creciendo y se hizo necesario ampliar las jornadas y los días de trabajo. Sin embargo, siempre se aferró a la idea de mantener la flexibilidad horaria. “Cuando salió lo de las 40 horas me pareció justo para todas. La mayoría somos mujeres y es interesante equiparar los horarios. Y si nuestra empresa está orientada al bienestar físico y emocional de las personas, la idea es partir por casa”, expone Mujica.

Por otro lado, Alfredo García –fundador de Dando La Hora, un e-commerce de relojes vintage que existe desde 2018 - dice: “Tenemos que ayudar a generar un buen ambiente, de buena onda, de construir algo más relajado, pero igual de productivo. Nuestra meta no es crecer el doble todos los años, sí crecer para pagar mejores sueldos, pero es importante conseguir un buen ambiente, y para todo eso sí influyen las 40 horas”.