Todo lo que hay que saber sobre el mycoplasma

Un aumento inesperado de casos encendió las alarmas a nivel nacional. El 18 de octubre, el Ministerio de Salud emitió una alerta sanitaria por la existencia de un número mayor al habitual de neumonías causadas por la bacteria Mycoplasma pneumoniae.

Pero la situación se volvió aún más dramática este 25 de noviembre. Sofía, una menor de 13 años originaria de Litueche, Región de O’Higgins, falleció en el Hospital de San Fernando producto de complicaciones cardiorrespiratorias asociadas a esta enfermedad.

Las autoridades monitorean un brote en el colegio de Sofía. En su curso hay dos casos más confirmados. “Esta enfermedad tiene un período de incubación prolongado. Es posible que ya pudiéramos tener otras personas de la comunidad escolar que estuvieran contagiadas”, dijo Carolina Torres, Seremi de Salud de O’Higgins.

“Se tiene que ver cuántas personas infectadas hay, ver los cuadros más leves, pero lo más importante es tratar el caso índice y ver si hay alguien más contagiado y ahí se toman las medidas a tratar”, explica Mónica Núñez, médico familiar con especialización en pediatría y académica de la Escuela de Medicina de la Universidad Andrés Bello UNAB.

A causa de estos acontecimientos, el 29 de noviembre, la senadora de Renovación Nacional, María José Gatica, envió un oficio a la ministra de Salud, Ximena Aguilera, solicitando medidas urgentes que protejan la salud de niños y niñas, entre esas; anticipar las vacaciones.

Las carteras implicadas evaluaron la medida y la respuesta del ministro de Educación, Nicolás Cataldo, fue que la cantidad de contagios y el efecto que tendría sobre el sistema y sobre las familias, no hacía recomendable tomar una decisión tan drástica, pero que no lo descartaba porque estaban sujetos a las disposiciones de la autoridad sanitaria.

Por su parte, la ministra de Salud, Ximena Aguilera, explicó que no existían brotes diseminados en todas las escuelas, por eso iban a priorizar el análisis caso a caso. “Si se detecta un brote en un cierto establecimiento escolar, ese se puede tratar de controlar, cerrar, etcétera”, explicó.

La bacteria Mycoplasma pneumoniae no es nueva para los equipos de salud. Pero ¿a quiénes está afectando y cómo se está manifestando? ¿Cuán peligrosa es, si estuvo a punto de causar el cierre del año escolar por adelantado en todo el país?

La Mycoplasma pneumoniae “era un poco más frecuente en gente más joven. Pero puede producir neumonía en cualquier grupo de pacientes: jóvenes, adultos y adultos mayores”, explica Mauricio Salinas, médico y presidente de la Sociedad Chilena de Enfermedades Respiratorias SER.

“Siempre ha afectado más bien a preescolares y escolares, pero ahora también lo estamos viendo en niños, en guagüitas más chiquititas y en personas también adultas”, aclara Lorena Tapia, infectóloga pediátrica de Clínica Universidad de los Andes.

“Dado que hay una circulación mayor, las personas que tienen problemas inmunitarios o condiciones de vida de mayor o menor edad pueden contagiarse y hacer complicaciones. Eso es bien equivalente a lo que podría haber ocurrido en el Covid”, dice Mónica Núñez.

En Chile, durante 2023 se registraron 834 casos, mientras que en lo que va de 2024 ya se han reportado 1.833. De estos, 422 se detectaron en agosto, 571 en septiembre y el mismo número en octubre, además de 477 en noviembre. “En Chile no había ocurrido un brote así”, dice Mauricio Salinas.

“La alerta se decretó por el aumento de casos. Normalmente nosotros tenemos mycoplasma en algunos cuadros respiratorios”, explica Lorena Tapia. Según el Instituto de Salud Pública ISP, la bacteria es responsable de aproximadamente el 20% de las neumonías.

“Lo que más ha llamado la atención en este último tiempo es el número aumentado de casos respecto de años anteriores y además se ha presentado en algunos de ellos con más gravedad y neumonías más complejas que han necesitado hospitalización”, agrega.

Respecto del microorganismo, Mónica Núñez de la UNAB comenta que “es un conocido de mucho tiempo, lo que pasa es que se ha hecho más preponderante en este minuto que no está explicado por nada. No hay una explicación clara de por qué aparece”.

“Cuando se dan estos brotes epidémicos o brotes más intensos puede ser porque estas bacterias tienen características que las hacen más transmisibles. Entonces, quizá está circulando una especie de mycoplasma más contagiosa”, explica Lorena Tapia.

“Es altamente contagiosa, pero no altamente grave”, apunta Mónica Núñez. Sí puede ser mortal, dice Mauricio Salinas. “Como buena neumonía, existe un subgrupo de pacientes que pueden tener un cuadro grave y eventualmente letal”, explica.

La alerta sanitaria hace que los profesionales de la salud estén atentos y realicen un diagnóstico oportuno. Por ejemplo, que puedan considerar a esta bacteria como una de las principales causas ante un paciente con un cuadro respiratorio.

La atención a la sintomatología debe ser aún mayor porque la neumonía por mycoplasma no se presenta como lo haría una “tradicional”, con mucha fiebre, decaimiento y tos “con quejidos”, como la describen los especialistas. Se trata de un cuadro “larvado” que se pesquisa a través de un examen PCR o una medición de anticuerpo en la sangre.

Los síntomas, explica Mónica Núñez, son los mismos de un cuadro respiratorio:

• Dolor de garganta
• Congestión
• Dolores generales
• Tos

Es parecido a las otras enfermedades infecciosas y respiratorias. Lorena Tapia detalla cómo se manifiesta:

• Fiebres persistentes, altas
• Compromiso del estado general o un compromiso del ánimo, de la alimentación
• Dificultad respiratoria o una tos que se ha intensificado y con sensación de ahogo

Si después de cinco o seis días esta sintomatología no cede y una tos intensa e irritativa persiste por más de 10 días, es momento de consultar. “Hay que sospechar de esta posibilidad porque haces una insuficiencia respiratoria”, dice la académica UNAB.

El estado de inmunidad del paciente es muy importante frente a la infección. “La mortalidad de las neumonías, está asociada a varios factores y una de ella tiene que ver con el estado de los pacientes”, dice Mauricio Salinas.

“Las personas que están enfermas graves, quienes están en diálisis, los pacientes que están inmunosuprimidos, por ejemplo, los que están en quimioterapia. Los pacientes muy añosos, diabéticos, cardiópatas o enfermos respiratorios crónicos, los lactantes, son generalmente población de riesgo”, señala el médico.

Mauricio Salinas recomienda a este grupo de la población consultar preventivamente ante un cuadro respiratorio. Otros que deberían hacerlo son las personas que han tenido contacto con algún enfermo. “Hay gente que ha tenido un familiar, un hijo con esto y empiezan con síntomas, esa gente que consulte”.

¿Cómo se contagia? “Es igual que el Covid”, comenta el doctor Salinas. Como toda infección respiratoria, a través de secreciones respiratorias provenientes de personas infectadas. “Eliminas esta bacteria en la tos, al hablar fuerte, al estar en contacto con saliva”, explica Lorena Tapia.

Las medidas de prevención son similares a las que se establecieron en pandemia, explica Mónica Núñez:

• Ventilación adecuada
• Lavado de manos
• Usar mascarilla en espacios cerrados
• Usar el antebrazo al toser o estornudar

La recomendación para quienes tengan una afección respiratoria es autoconfinarse. “La gente que está con cuadros virales o agudos o los enfermos respiratorios que no saben lo que tienen, que eviten circular por lugares públicos”, indica Mauricio Salinas.

Para la bacteria Mycoplasma pneumoniae no hay vacuna, pero se maneja con antibióticos. El tratamiento está disponible tanto en la red pública como en la red privada de salud. “Son unos antibióticos que se llaman macrólidos, que los más conocidos son la azitromicina y la claritromicina”, aclara el doctor Salinas.

“Son distintos a los de las penicilinas, amoxicilina y demás. Toda esa familia no hace efecto en esos cuadros, por lo tanto, una de las cosas que se tiene que evitar es la automedicación”, subraya la doctora Núñez.

Mauricio Salinas señala que “es bueno informar a la población que esto está pasando. El ministerio y los establecimientos de salud están preocupados, hay que vigilarlo, pero en general no es una bacteria de alta mortalidad. Tiene buen tratamiento, hay buenos exámenes para identificarla. Es una cosa tratable”.

Respecto de si el aumento de casos de la bacteria mycoplasma podría adquirir gravedad más allá del brote epidemiológico, los expertos lo descartan.

“Las pandemias de refieren a cuando tú tienes a la población completamente susceptible. O sea, toda la población está en riesgo. Es poco probable que el cien por ciento de nosotros tenga mycoplasma”, explica Lorena Tapia.

“Nosotros nos hemos infectado alguna vez, podríamos haber tenido contacto con esta bacteria antes, pero ahora está circulando probablemente alguna bacteria un poquito más agresiva, que infecta un poco más y está encontrando a quien infectar”, agrega.

“El covid era un virus nuevo, lo mismo que la influenza que fue pandémica en 2009. Son agentes nuevos que tienen alta contagiosidad y por lo tanto todos estamos expuestos y susceptibles, o sea, somos capaces de infectarnos y enfermar”, dice.

“Enfermarme con mycoplasma es un poco distinto porque es algo que ha estado circulando siempre y lo que hay ahora es un aumento de casos y de la gravedad de estos”, concluye la especialista.