Anglepoise Lamp George Carwardine, 1933

La lámpara Anglepoise, boceteada y fabricada por el inglés George Carwardine, en 1933. La historia es conocida: Carwardine era un ingeniero que trabajaba para mejorar la suspensión de los autos. Probó con un modelo de resorte, una, dos, tres veces. Llegó a uno insuperable que tenía la gracia de moverse con facilidad en cualquier dirección y después permanecer rígido en la posición que uno deseara. Probó el resorte en una lámpara que imitaba la articulación y movimiento del brazo humano, y la pieza fundamental de esta 'articulación' por supuesto que fue el resorte. La lámpara sirvió en un comienzo a los trabajadores de la fábrica en la que el ingeniero trabajaba, y luego se creó un modelo comercial para la casa.

Una de sus virtudes fue que, al tener una superficie reflectante en su interior, se promovió como un eficaz modo de ahorrar energía eléctrica, ya que la luminosidad de una ampolleta de 'x' watts se multiplica por un poco más que dos gracias a su superficie y, en definitiva, ilumina más.

Design Museum. Se encuentra cerca de la Tate Modern, en el South Bank de Londres. Fue creado en 1989 como parte de la recuperación de un área de la ciudad que había quedado abandonada por años. El museo tiene una colección propia y gestiona importantes muestras temporales, que abarcan la historia del diseño en su complejidad, desde la obra de Manolo Blahnik hasta diseño gráfico de objetos e industrial.

Durante sus años de existencia esta lámpara ha tenido rejuvenecimientos y versiones, la más reciente en 2006, cuando se lanzó en tamaño XL, en su 70 aniversario.

La imagen que ustedes ven arriba corresponde a una de las pocas piezas originales que se conservan, y que hoy pertenece al Design Museum, que celebra una serie de nuevas adquisiciones con la muestra This is Design (hasta enero). Uno de sus atractivos es que muchas piezas, que se compraron durante los últimos 10 años, se exhibirán por primera vez después de una nueva catalogación, que da un contexto y una línea curatorial diferentes y que responden a la pregunta ¿cómo nos ha cambiado el diseño? Una reflexión necesaria y quizás el mejor modo de situar el diseño. La actualización, además, consideró nuevas secciones en el recorrido y en los catálogos que el museo edita: Identidad y La Revolución Digital, por ejemplo. Junto a la Anglepoise se podrán apreciar un teléfono de 1920, la bicicleta Moulton, un Mini original y la señalización vial de los años sesenta que se usó en Londres.
Web: designmuseum.org