Fin de verano, vuelta a la realidad y a días más rutinarios. Para que no se transforme todo en una lata, la cocina como centro de control de la casa juega un rol fundamental, equiparla y tenerla armada con las cosas que más nos gustan es clave para que cocinar no sea un simple alimentarse, sino un momento de reunión familiar o con amigos, porque juntarse en torno a la comida es algo ancestral que traemos grabado a fuego como registro previo.
El fogón sigue siendo lo que da vida a una casa y por eso es que cada día gana más importancia en la arquitectura de casas y departamentos, incluso como lugar único en los muchos quinchos que se están construyendo y que ya les mostramos durante este verano.
Si les gusta cocinar, experimenten. Hoy, gracias a los nuevos habitantes que han llegado a nuestro país, probamos ingredientes y combinaciones desconocidos a nuestro paladar, y es solo una de las muchas cosas buenas que significa la inmigración. Y si se atreven con estas combinaciones, aprovechen de comer fresco y sano, no comida comprada o chatarra, porque estamos engordando como país, especialmente los niños, y eso es algo que tendrá a futuro un costo altísimo para todos. Cocinen en familia; mientras uno prepara, el otro mezcla o pica, y así se hace todo más rápido y fácil. Para inspirarlos les mostramos algunas cocinas donde a nosotros nos gustaría estar y cocinar... ¡que las disfruten!