Editorial

Este año la Fundación Cultural Montblanc, con sede en Hamburgo, decidió premiar a Juan Yarur por su aporte al desarrollo de la escena artística local. Es primera vez que este importante premio lo recibe un chileno, reconociendo el trabajo que Yarur lleva realizando con su Fundación AMA. Juan partió coleccionando de manera intuitiva y con el paso de los años le ha dado estructura a esa colección, pero más importante es el apoyo que ha ofrecido a artistas locales a través de residencias en el extranjero. Estas residencias permiten que artistas chilenos conozcan y construyan redes de todo tipo en el extranjero, algo fundamental para nivelar la calidad de la escena local; salir y ver el mundo hoy es imprescindible. El mecenazgo en el arte es fundamental y ojalá más personas decidan seguir esta huella.

Otros ejemplos de los cuales deberemos aprender son los ejercicios que algunas oficinas de arquitectos están haciendo al proyectar vida fuera de nuestro planeta; lamentablemente creo que es algo que tendrá que ocurrir antes que tarde. A la velocidad que estamos depredando nuestro entorno y generando daños permanentes en los ecosistemas dudo que nos quede planeta para muchos años. Si queremos revertir esta situación hay que tomar medidas radicales hoy, y lo de las bolsas plásticas puede ser una buena intención, pero ¿qué ocurre con las miles de bolsas más durables que estamos comprando ahora y que inevitablemente terminarán también en un relleno sanitario, quizás no en unas semanas, pero sí en meses o años? ¿Dónde están las políticas reales de reciclaje?, ¿el fomento a generar menos desechos? Los ejemplos existen, las tecnologías también. Es cosa de buscar afuera y decidir cuáles son las que mejor se adecuan a nuestra realidad de país. En este caso no tenemos que inventar la rueda, solo saber implementarla bien.