El mundo no tiene registros o antecedentes sobre los cambios que la pandemia del Covid-19 está generando. Se hacen comparaciones con la gripe española o con otras que han tenido impacto en grandes grupos poblacionales, pero hoy el mundo es muy distinto a cuando esos brotes se desarrollaron. Somos más urbanos, con mayor densidad de personas por metro cuadrado, con mejor acceso a la información, pero además nos movemos mucho, entre barrios, ciudades y países, solo por nombrar algunas de las nuevas características. La pandemia también ha demostrado cómo una ciudad posee múltiples realidades, muchas de las cuales están lejos de entregar calidad de vida a sus residentes, y sobre esto y más conversamos con Sergio Baeriswyl, presidente del Consejo Nacional de Desarrollo Urbano. El consejo ha elaborado una pauta de más de cuarenta medidas que pueden impactar de manera positiva en el desarrollo de las ciudades y, por ende, en la calidad de vida de sus usuarios. Recurren al concepto de ‘ciudad de 15 minutos’, idea que la ciudad de París ha venido proclamando hace ya un tiempo y que otras como Bogotá también están analizando. La idea detrás de esta frase es facilitarles la vida a sus residentes y que idealmente tengan a solo 15 minutos de caminata o bicicleta las soluciones a funciones esenciales como son casa, trabajo, salud, educación, ocio y provisiones.
En estos momentos quizás el foco está puesto en la emergencia, pero hay que comenzar a analizar cambios y trazar líneas para una ciudad mejor, conectada de nuevas formas y más inclusiva en todos los niveles posibles, y es lo que el CNDU está proponiendo.