1. ¿Cómo parte tu interés por los temas ambientales y de sustentabilidad?
Quizás hubo pequeñas situaciones que fueron encendiendo una chispita, pero el fuego se encendió cuando me metí al Comité Ambiental del colegio en el que trabajaba (2015). En ese momento partimos con el proyecto de instalar contenedores diferenciados, y fue cuando me di cuenta de que el reciclaje era apenas una parte de la solución de la tremenda crisis socioambiental que estábamos viviendo. Desde ese momento he tomado cada taller, seminario y academia que he podido. Particularmente, la Academia Circular (de Circular, la Asociación de Consumidores Sustentables, de la cual hace un año soy parte del directorio) me hizo darme cuenta del impacto que genero con cada decisión, por pequeña que sea, y hacerse cargo de esto es vivir el activismo diariamente.
2. ¿Por qué adoptas la escala doméstica, las pequeñas acciones como estrategia?
Como te decía, es un problema sumamente complejo y multisistémico; se requiere un cambio desde políticas públicas, del sector empresarial, de la sociedad civil y a nivel doméstico. Mi experiencia fue de menos a más. Desde empezar a reciclar, buscar formas de comprar con menos residuos, evitar productos cuyos valores no comparto, ya sea en su producción o su publicidad. Son cosas que además se ven alcanzables, logrables y son solo ejemplos, frente a los cuales muchas personas podrían decir “pero eso no mueve la aguja”, y, claro, por sí solo quizás no, pero sí lo hace cuando también logro entusiasmar a más personas en este camino. En el minuto que te sensibilizas esto no tiene vuelta atrás y comienza a permear en tus redes. En mi caso hasta logramos que la sustentabilidad fuese un programa dentro del proyecto educativo.
3. En tu perfil de Instagram encontramos desde consejos de reciclaje y cocina hasta concientización política. ¿Por qué te parece importante Escazú?
Nunca olvidaré un profesor del Diplomado en Educación Ambiental que dijo que “todos los problemas ambientales tienen consecuencias sociales”. Un planeta cada vez más sobreexplotado tiene y tendrá consecuencias más dramáticas sobre la sociedad y especialmente sobre grupos vulnerables, por lo que es básico un tratado de derechos humanos sobre el medioambiente, específicamente en el territorio de América Latina y el Caribe. Es una forma de exigir a los países el cumplimiento del derecho a vivir en un medioambiente sano y libre de contaminación, además del acceso a la información, mayor participación de la ciudadanía y resguardo de activistas ambientales y pueblos originarios.
4. ¿Qué respuesta tienes de las personas que te siguen?
Siempre quise que @loquemaspuedo se transformara en una comunidad, y creo que hoy se ha transformado en eso. En general hay harta interacción, las personas comentan un montón contando sobre sus propias experiencias, aprendizajes, entregando sus datos o tips. Se nota en los comentarios y DM cómo en estos años las preguntas han ido cambiando y son cada vez menos superficiales; van demostrando que cada vez son más quienes se cuestionan sus hábitos cotidianos en el espacio público e incluso en lo laboral. Se van dando cuenta cómo el consumo ES un acto político.
5. Háblanos de tu libro de cocina.
La cocina ha sido una de mis pasiones, cuando me metí en la sustentabilidad obviamente se juntaron ambos mundos y fue brutal descubrir el impacto que tiene nuestra alimentación a nivel social, ambiental y económico, llevándome a inventar recetas para aprovechar al máximo la comida; voy a recuperar a la feria y constantemente intento informarme sobre el impacto de lo que consumo.
Conversando con Carola Moya, directora de STGO SLOW (laboratorio de tendencias en sustentabilidad), surge el proyecto de crear un libro digital con recetas chilenas, para que sean preparaciones con olores y sabores familiares, adaptadas a una dieta climatariana.
Es una propuesta para reducir el impacto de nuestro estilo de vida, promoviendo una alimentación más saludable y fomentando prácticas de consumo cero residuos, con la intención de bajar la huella ecológica y mejorar la calidad de nuestra alimentación, disminuyendo el impacto ambiental y resignificando los alimentos por su valor nutricional y no por su aspecto.
Quisimos que fuese digital, para así llegar a más personas, reduciendo la huella ambiental de crear un libro físico; además permite que sea un libro interactivo. A través de hipervínculos se puede acceder a contenido complementario como videos, recetas base e información para que sea amigable hasta con quien menos se maneje en la cocina.
6. ¿Cómo sería una receta, por ejemplo?
El libro tiene 17 recetas, las que además se pueden combinar entre ellas; por ejemplo, puedes preparar las empanadas de pino con tallos de acelga y aprovechar las hojas de las acelgas para preparar unas verduras asadas rellenas con lentejitas y pesto de acelgas. Todo esto con ingredientes que encuentras en cualquier parte.
7. ¿Dónde lo encontramos?
#LOQUEMASPUEDOCOCINAR está a la venta en la web www.stgoslow.cl, el que se descarga como PDF siendo compatible con prácticamente cualquier dispositivo digital. @loquemaspuedo