Es literalmente una sopa de verduras de estación. Se pueden agregar proteínas, carbohidratos, legumbres, granos. Algo así como nuestra carbonada o porotos granados con pilco. Parte de caldo enjundioso, el resto picado y todo al dente. Minestrone viene de Italia, que le echan pasta. También están el menestrón peruano y el español. La verdad es que todos pueden hacerla con la autoridad que les plazca.

A mí me fascina lo regalonas que son, esa cosa como de cuidado y cariño que tiene un buen caldito. Y ahora que empezó el fresco, el resfrío y el deseo de estar puertas adentro lo encuentro más que ideal. Hablo de esto porque desde que probé la de la Pilar Rodríguez, grandiosa cocinera chilena que está asesorando el restaurante de las bellísimas Majadas de Pirque, que no dejo de pensar en ese minestrón de pollo con garbanzos y kale. ¡LA BOMBA!

Después del interrogatorio la 'pilli' dice lo siguiente: "La clave es el caldo. Parte de una sopa de pollo que se troza separando trutros y pechuga con hueso. Se echan las carcasas y lo trozado a una olla con aceite de oliva y se dora. Después se suman cebollas, zanahorias, puerro y apio con hojas picados grande, sal y pimienta negra más el bouquet garni (atadito de laurel, tomillo, la parte verde del puerro) y se cubre con agua hasta el tope de las verduras. Suelta hervor, bajan fuego y se cocina hasta que se separe la carne de los huesos. Cuelan. Aparte cocinan los garbanzos. Finalmente pican finamente cebolla, zanahoria en rodajas, puerro y lo ponen a cocer con el caldo. Desmenuzan las pechugas de pollo y lo echan cuando están cocinadas las verduras más los garbanzos. Apagan y reservan hasta el otro día (eso da más sabor). Antes de servir agregan el kale, pak choy y están. Maravilla en sus bocas y alma. @raqueltelias