¿Sabías que es posible conectar el celular al monitor o tv para ver los contenidos a buen tamaño? ¿o que puedes acceder a Windows y estar en una tele reunión con, por ejemplo, Word funcionando al mismo tiempo? Hoy más que nunca el celular se ha vuelto "la" ventana para mantenernos en contacto con el mundo y puede ser una tremenda herramienta para trabajar desde casa.

A la vez, ahora que pasaremos las cerca de 9 horas de trabajo en modo remoto, desde la casa, conviene chequear nuestra silla de escritorio, ya que las malas posturas, los muebles de tamaño inapropiado, o de alturas inconvenientes generan una serie de dolencias, desde  lumbago hasta contracturas de cuello.

En Chile La SUCESO, Superintendencia de Seguridad Social informaba, por ejemplo el año pasado, del aumento de las enfermedades laborales en un 8%, con las músculo esqueléticas a la cabeza; 43%, superando a las mentales que alcanzaban un 36%.  Aprovechemos esta ola de autocuidado para resguardar también nuestros queridos músculos y esqueleto.

DIME QUÉ TE DUELE Y TE DIRÉ QUÉ ESTÁ MAL PUESTO

Lumbago, tendinitis y otros achaques tienen entre sus causas las malas posturas que adoptamos cuando al trabajar y teclear en el computador nuestro mobiliario o nosotros no estamos posicionados idóneamente. Dale un vistazo a la lista:

SI TE DUELE:

1. El cuello: puedes tener el monitor del computador muy alto, bajo o de lado.   Tienes que poder leer la pantalla a la altura de tus ojos y de frente, si no girarás, estirarás o flexionarás el cuello sin darte cuenta, tensando el área de tus pobres cervicales.     2. Los hombros y /o la parte alta de la espalda: puedes tener la mesa muy alta, lo que te lleva sin darte cuenta a tener los hombros levantados. También si la mesa es pequeña, con poco espacio para el mouse y el teclado, es probable que estés escribiendo con los antebrazos o muñecas no apoyados.

3. La espalda: al estar sentados la parte lumbar de la columna cambia de una forma cóncava a una convexa, lo que genera esfuerzos en los ligamentos y musculatura de esa zona que pasan la cuenta al estar muchas horas en la silla. Si el respaldo es rígido o la mesa de trabajo es muy baja tendrás dolores. Una opción si no tienes una silla con apoyo es agregar un cojín lumbar.

4. Las manos/muñecas: puede ser porque tu teclado no esté plano, lo tienes elevado o tecleas con los antebrazos en el aire. Fíjate cómo escribes. Las muñecas deben estar relajadas, ni hacia arriba, ni hacia abajo, ni torcidas, y los antebrazos apoyados en una superficie blanda, no en el borde del escritorio. Los codos van rectos y apegados al cuerpo en cerca de 90 grados.

5. Las piernas: tienes que tener espacio para poner los pies en el suelo con las piernas en un ángulo mayor a 90 grados. Puedes tener también un reposapiés que te permita variar de posición y relajar la presión de muslos y corvas contra el asiento.

FUENTES:INSTITUTO DE BIOMECÁNICA DE VALENCIA ICHS

¿EN QUÉ FIJARSE?

Si estás pensando cambiar tu silla de trabajo toma nota de estos pequeños detalles que harán la diferencia. Tu cuerpo te lo agradecerá:

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