Adriana Sierchuk es arquitecta y fundadora del estudio que creó junto a Gabriela Barrionuevo. “En nuestra opinión, tres elementos son necesarios para la concreción de una obra de arquitectura: el ‘material’, poseedor de poesía, de sustancialidad, la esencia de los muros y contenedor de espacios; la ‘geometría pura’, que dota de estructura a una obra, y la ‘naturaleza’, a la que entendemos como racional y ordenadora, un paisaje controlado que embellece una obra de arquitectura”, explica Adriana sobre la filosofía que llevan a cabo hace mas de 30 años y con la que vienen concretando obras en distintos barrios de las afueras de Buenos Aires. Y agrega: “La arquitectura adquiere fuerza, riqueza, cuando se consigue la integración entre los tres elementos: materiales, geometría y naturaleza. Cuando los volúmenes construidos se funden con los espacios interiores y el paisaje en pos de lograr una obra de una belleza tal que genere sensaciones”.
Fue esta visión particular de entender la arquitectura la que la llevó a comprar un terreno doble en un barrio recién construido en la localidad de Tortuguitas. “Fue hace 20 años y por entonces acá no había nada ni nadie”, cuenta sobre la decisión que tomó por aquel entonces con su marido y sus 3 hijos, que hoy ya no viven con ellos.
La casa se construyó con esta mirada integradora entre el adentro y el afuera, y si bien Adriana sostiene que le llevó 20 años terminarla y todavía no está lista, la coherencia que emana es evidente. Todo en esta casa está ahí porque fue atravesado por un proceso de diseño. Desde los muebles rescatados de anticuarios que dan una lectura uniforme a los ambientes, hasta los objetos rústicos y las obras de arte que completan la idea (configurando un popurrí de estilos), que denotan el gusto de su creadora.
“La construcción es contemporánea, pero son los detalles los que terminan de definir el estilo”, dice Adriana, quien confiesa ser amante de las antigüedades y del arte clásico; “de la vieja guardia”, como le gusta decir a ella.
Ideas que inspiran
Una casa donde la naturaleza es un elemento tan importante como el material y la geometría.
1. Hamaca Palmino, 100% hecha a mano, $235.000 (hamay.cl) 2. Rosy Angelis: Esta lámpara de pie fue diseñada en 1994 por Philippe Starck para Flos. Posee un difusor en tejido superligero, pies en aluminio y un cuerpo portalámpara en policarbonato expandido. Su elegante moldeado y la emisión de luz nostálgica (difusa) la hacen una pieza clásica, ideal para habitaciones o salas de estar. 3. Florero Cabimas, $10.000 (@ameritexcl) 4. Lámpara Fat Bottom Girl Bronze, $38.000 (@bigpig_chile) 5. Bandeja decorativa, pieza única, consultar precio (@bigpig_chile) 6. Globo terráqueo educativo, $59.900 (@mappin.cl) 7. Silla antigua, modelo Viena, consultar precio (laanticuaria.cl) 8. Set Puico, 2 mesas laterales, $259.990 (@ameritexcl) 9. Sofa seccional Radley Richt, crudo, $2.190.000 (Milk.cl).