Cómo aprovechar el mercado de nabos en Animal Crossing: New Horizons
Una de las tradiciones de la saga regresa en su versión para Switch como una de las formas más entretenidas de hacer dinero con un poco de riesgo.
El comienzo de un Animal Crossing siempre es amable y enternecedor, pero con el paso de las semanas, nos damos cuenta que las cuotas de dinero que nos pide Tom Nook para ampliar nuestra casa o adquirir ítems exclusivos se hacen cada vez mayores.
Y hay varias formas de conseguir las preciadas bayas: hay quienes se dedican a cazar animales exóticos, a plantar y vender muchas frutas o a vender nuestras creaciones en el Mini Nook. Pero la forma más entretenida es sin duda apostar nuestros ahorros en el mercado de los nabos.
Esta opción se habilita el primer domingo que pases luego de construir el Mini Nook, y es un mercado de especulación que te permite invertir tu dinero en un sistema que puede hacerte ganar como nunca, o bien, perderlo por la codicia.
Cada domingo en la mañana, desde muy temprano comenzará a rondar una nueva habitante llama Juliana. Juliana es la nieta de Juana, conocida en entregas anteriores por haber inventado todo este esquema de negocios que como vemos, ahora se ha convertido en un negocio familiar.
Y esto funciona así: Juliana llegará ofreciendo nabos a un precio determinado, que nunca suele pasar las 200 bayas por unidad, aunque por lo general, siempre ronda los 100 y algo.
A ella le puedes comprar toda la cantidad que quieras -o que puedas-, pero todo se vende en grupos de a 10. O sea, Si llega Juliana ofreciendo nabos a 110 pesos, la inversión mínima es de 1100.
Los nabos no son vegetales tradicionales: no pueden plantarse, no crecen en árboles y una semana después de adquirirlos, se pudren y solo gastan espacio. Entonces ¿Para qué quiero comprarlos?
Esta es la apuesta: Los nabos pueden venderse durante la semana en el Mini Nook por un precio que varía todos los días. A veces sube, a veces baja. Es como la bolsa.
Y el rango de precios es amplio: desde 60 bayas hasta unas 800 en los casos más extremos. Por supuesto, comprar a 100 y vender a 70 no es negocio, pero venderlos a 200 o 300, puede ser muy provechoso.
Por supuesto, esto es totalmente al azar y mientras avanza la semana se van acabando las posibilidades de venderlos ya que recuerda, para el próximo domingo ya no valen nada.
Hasta ahora, suena demasiado peligroso como para arriesgarse, pero este es el secreto: con colaboración entre amigos, casi siempre obtendrás ganancia segura.
Por ejemplo, el día domingo entre tus amigos pregunta y postea a cuanto vende sus nabos Juliana. Quien tenga el precio más bajo abre su isla y ahí todos pueden apostar lo que quieran con ella.
Luego, en la semana es lo contrario: quien tenga una compra de nabos muy alta puede abrir su isla para que otros aprovechen el precio y procedan a venderlo todo. No olvides llevar frutitas o algún recuerdo para quien dio el dato o al menos felicítalo por lo linda que está su casa.
EN RESUMEN: Compra barato, vende caro, tienes una semana para hacerlo y con la ayuda de tus amigos que también lo estén jugando, te aseguro que no tendrás problemas financieros en tu isla.
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