No es su pantalla OLED, su diseño sin bordes, su nuevo procesador A11 Bionic, su cámara doble o la posibilidad de poder cargarlo completamente de manera inalámbrica junto a todos sus dispositivos.
No.
La gran novedad del iPhone X y la razón por la cual estoy empezando a juntar las monedas para poder adquirir el último teléfono de Apple tiene un solo nombre: Animojis. Los animojis, son como su nombre nos adelanta, emojis animados, los cuales funcionan a la par con el nuevo sistema de reconocimiento facial del teléfono, llamado Face ID.
Lo que permite crear la maravilla del animoji es un proyector infrarrojo que viene frente a la cámara y que permite desplegar más de 30 mil puntos invisibles sobre el rostro de la persona. Esto permite al celular contar con un modelado 3D del rostro del usuario, lo cual puede servir para cosas tan aburridas como poder identificarse frente al celular, o cosas mucho más interesantes como poder convertirse en un emoji parlanchín.
El sistema de mapeo facial de Face ID puede combinarse con muchas otras aplicaciones. En Snapchat, por ejemplo, los filtros faciales se aplican mucho más rápido y apegados al rostro. En la cámara, puede usarse para aplicar filtros de iluminación solo al rostro, y en el caso de Animojis, son capaces de capturar hasta 50 tipos de movimientos musculares diferentes, para poder hacer que uno se convierta en un emoji por tiempo limitado.
¿Y para qué me quiero convertir en emoji? En primer lugar, la pregunta debería ser por qué no quieres ser un emoji, y en segundo lugar, para poder usarla en aplicaciones como iMessage para dejar mensajes de voz que se leen con tus gestos, o simplemente para darle intención a tu emoji. ¿Cuántas veces mandaste un icono pensando que significaba algo y al otro lado lo interpretaron de otra manera? Ahora todo será mucho más claro con este sistema.
Los emojis se han vuelto parte de nuestra cultura y nuestra comunicación digital y convertirlos en algo mucho más personalizado, es el paso que necesitaban para mantenerse por mucho tiempo más. Los animojis harán mucho más bien para la cultura de estos íconos que la propia Emoji Movie, sobre todo si pensamos que ya Black Mirror los tiene en la mira.
Porque quizás no haya nada más alentador que un futuro en donde los emojis ya no hablen por nosotros, sino que seamos nosotros.
https://twitter.com/blackmirror/status/907695792202317832