Cuando fue lanzado en el año 2016, el navegador Brave fue presentado como una alternativa mucho más segura pero también, sin los molestos avisos que aparecen cuando navegamos por la red. Creado en base a Chromium, se ha convertido en una de las alternativas más populares al imperio que actualmente mantienen los ya clásicos Chrome, Safari, Firefox e incluso Edge.
Pero hasta ahora, Brave se había mantenido, como la mayoría de estos navegadores alternativos, dentro de ese oscuro cajón de cosas que sabemos que deberíamos usar, pero preferimos quedarnos con la comodidad de lo conocido. Pero mientras Brave intentaba venderse por el nivel de seguridad y privacidad que ofrece al navegar, ahora el browser se ha puesto de moda gracias a que un grupo de YouTubers ha descubierto como utilizarlo para ganar dinero que vaya directamente a su bolsillo.
El alza de Brave como nuevo aliado de YouTube comenzó a crecer cuando el sitio anunció sus cambios en sus políticas de monetización de videos, los cuales se han ido poniendo cada vez más estrictos, en parte por la presión de los avisadores para que sus publicidades no aparezcan asociadas a cualquier tipo de contenido. Estos cambios, llamados Admaggedon por los YouTubers se han ido haciendo cada vez más estrictos, por cada polémica que aparece como las de Pew Die Pie o Logan Paul, los que han hecho que ganar dinero con YouTube sea cada vez más difícil.
El último cambio llegó hace unas semanas, y fue el que quebró todas las reglas del juego. De ahora en adelante, los canales requerirán mil suscriptores y 4 mil horas de contenido visto por usuarios al año para ser parte del programa de patrocinadores, lo que claramente beneficia más a los poderosos, pero también los obliga a seguir generando contenido que no sólo se suba sino que se vea y harto.
Y es por eso que los YouTubers están buscando maneras alternativas para mantener sus gastos: abrir cuentas de Patreon para que la gente les aporte dinero de manera directa, o abrir líneas de ropa y merchandising, como el propio Logan Paul.
Pero ahora es donde entra Brave, ya que si bien viene con un sistema que bloquea los avisos, incluye por defecto una opción para que los usuarios puedan pagar directamente a los sitios que ellos visitan, sobre todo a los creadores de contenido.
Brave se ha dado cuenta de esto y recientemente realizó una gran alianza con 6 mil de los YouTubers más importantes, que en conjunto acumulan 110 millones de suscriptores, quienes pueden recibir pagos directamente de sus fanáticos desde el navegador.
El sistema de Brave funciona con su propia criptomoneda, llamada Basic Attention Token, o simplemente BAT. Cada usuario puede asignar un presupuesto mensual, que se descuenta de su tarjeta de crédito para contar con un cierto número de BATs, los que puede distribuir como ellos deseen: desde sus YouTubers favoritos hasta ayudar a sitios como Wikipedia. Actualmente, Brave está con una campaña de fidelización en la que entregará 5 dólares por cada usuario que haya instalado la app a través de alguno de los videos del YouTube, por lo que apuestan a que, además, esta alianza servirá para ampliar su popularidad.
Pero lo cierto es que como todo el mundo de las criptomonedas, esto sigue en una suerte de nebulosa, ya que no se sabe si estos BATS tendrán algún valor en el largo plazo, pero también si es que puede ser regulado como ocurre actualmente con las transacciones de dinero realizadas para publicitar marcas.
Dicen que en tiempos desesperados nacen medidas desesperadas. Pero en esta ocasión ambas partes podrían salir beneficiadas, y en ese caso, la unión siempre hace la fuerza.