Si son parte de ese selecto grupo de personas que ha decidido perder 1 hora y 50 minutos de su vida viendo la adaptación cinematográfica de Cats, sabrán que no hay muchos elementos que puedan hacer aún más extraña a la producción comandada por Tom Hooper.
Sin embargo, desde mediados de marzo un rumor que se ha mantenido vivo en redes sociales ha instalado la posibilidad de que exista una versión aún más inquietante de Cats, donde los horribles gatos antropomórficos tienen orificios anales.
Los rumores sobre lo que ha sido apodado como el "Butthole Cut" de Cats comenzaron cuando el guionista Jack Waz recogió las declaraciones de un productor de efectos visuales que conocía el trabajo que supuestamente se hizo para borrar los oficios anales de los gatos de una versión de la película.
Obviamente esto dio pie a una tendencia en Twittter que bajo el eslogan #ReleaseButtholeCut pedía que esa supuesta versión de la película viera la luz. Y aunque posteriormente nuevos reportes echaron por tierra estos rumores, ahora todo apunta a que el "Butthole Cut" de Cats efectivamente habría existido.
The Daily Beast no quiso olvidarse de la posibilidad de una versión más rara de Cats y logró contactar a un artista de efectos visuales que trabajó en la película. Esa persona, que pidió no ser identificada, no solo reafirmó que el "Butthole Cut" de Cats sería real, sino que también sostuvo que todo el proceso para la creación de los efectos visuales de la película fue un verdadero infierno.
De acuerdo a esta persona, la producción de Cats estaba a mitad de camino cuando el equipo notó por primera vez un nuevo detalles en los felinos protagonistas.
"Cuando estábamos mirando las reproducciones, pensamos, '¿Qué demonios? Ustedes ven eso ?!'", relató el artista. "Lo detuvimos. Llamamos a nuestro supervisor y pensamos: '¡Hay un maldito orificio anal allí! ¡Hay orificios anales!' No eran prominentes, pero se veían ... Y estabas como,'¿Qué demonios es eso? ... Hay un puto orificio anal allí'. No estaba en tu cara pero, al mismo tiempo si estabas buscándolo, lo verías".
El artista consultado por The Daily Beast dice que la inclusión de ese detalle en el diseño de los gatos de Cats no fue algo que se habló por parte del equipo encargado de hacer los efectos visuales de la película.
"No hubo nadie que dijera: 'Queremos orificios anales'. Fue una de esas cosas que simplemente sucedió y se deslizó", señaló.
Así, para evitar más complicaciones en una apuesta que ya tenía problemas, una sola persona fue contratada para asumir la misión de borrar los oficios anales de los gatos.
No obstante, de acuerdo a esta fuente, los problemas en la producción de Cats no se acotan esa situación.
Según la fuente, el equipo encargado de los efectos visuales de la película fue sometido a largas horas de trabajo y tuvo que lidiar con la poca experiencia del director Tom Hooper con este tipo de producciones. Algo que en última instancia solo hizo más difícil su misión de adaptar el famoso musical .
"Fue pura casi esclavitud para nosotros, cuánto trabajo le dedicamos sin tiempo y todo fue difícil", dijo la fuente. "Estábamos tan apurados en el proyecto que no teníamos tiempo para nada. Entonces, cuando la gente dice: 'Oh, los efectos no fueron buenos' o 'La animación no es buena' o algo así, no es culpa nuestra. No tuvimos tiempo. Seis meses para hacer un trailer de dos minutos y cuatro meses para hacer una película de una hora y media. Mis cálculos son bastante buenos ... Podrías pensar que eso no tiene ningún sentido".
En particular, la persona que habló con The Daily Beast recuerda semanas de trabajo de 90 horas y acusa a Hooper de ser un director "horrible" y "condescendiente" que simplemente no sabría cómo funciona la animación.
De hecho, la fuente sostiene que Hooper habría exigido "ver videos de gatos reales realizando las mismas acciones que los gatos harían en la película. Y como saben, los gatos no bailan".
Si bien por ahora nada de esto está confirmado y permanece en el terreno de los rumores, con ese tipo de antecedentes en la producción el resultado final de la película está lejos de ser sorprendente.